“Una napa freática muy activa”. Ese fue el diagnóstico de la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT) para explicar por qué, de un momento para otro, se abrió un cráter del tamaño de una habitación en Córdoba al 400. “Se trata de una calificación nueva para mí esto de napa muy activa, que técnicamente no dice mucho. Por lo que pude ver, es mucho más probable que el hundimiento haya tenido que ver con alguna rotura del ducto de cloaca, cosa que no tiene por qué ser extraña ni misteriosa, ya que hablamos de caños que tienen 100 años”, analiza Franklin Adler, ingeniero especialista en hidráulica y autor de un trabajo que a mediados de los 90 investigó las napas freáticas dentro de las cuatro avenidas principales de nuestra ciudad, conformando un mapa de sus aguas subterráneas. Es posible que se trate de la última investigación que se haya realizado sobre esta materia. “En aquel momento colocamos freatígrafos durante un período prolongado de tiempo y sí, claro que sería interesante revisar y actualizar los resultados, pero por más que las napas hayan crecido, no tienen por qué ser un problema para el suelo ni para una cañería sana, sin roturas”, explicó. “De hecho, el crecimiento de las napas en la ciudad, en la mayoría de los casos que observamos, se alimenta de las numerosas pérdidas en las cañerías de agua y cloaca”, agregó el experto, aunque reiteró que no es ni preocupante ni sorprendente lo que ha ocurrido. “Sí sería bueno, para evitar desastres, implementar por ejemplo un sistema de control con cámaras de video que se introducen dentro de la red, como se hace en otros países”, opinó.

Desde el año 2003 comenzaron a registrarse problemas en la calle Córdoba al 400-700, siendo el síntoma visible el hundimiento de la calzada. Hubo intervenciones fuertes ese año y luego en 2006, 2007 y 2008; en todos esos casos el hundimiento tuvo que ver con inconvenientes vinculados a la cañería.  

AÑO A AÑO

feb/2003
córdoba al 500 luce como una sucesión de lomos de burro
El problema era insoslayable: la calle Córdoba se estaba hundiendo severamente, sobre todo a la altura del 500 (entre 25 de Mayo y Muñecas). Obras Sanitarias, la empresa que entonces tenía la concesión del agua, admitió su preocupación. Temían que se produjera un desastre en la zona, por lo que pidió a la Municipalidad que modificara el recorrido de los ómnibus para quitar algo de peso a la transitada arteria céntrica. La situación fue consignada en la edición de LA GACETA del 20 de febrero y el 25 comenzaron las excavaciones para investigar de qué se trataba. La rápida reacción permitió que no hubiera que lamentar accidentes graves, y también puso al descubierto el serio problema de un colector cloacal que se encontraba saturado. La solución fue colocar una cañería subsidiaria entre 25 de Mayo hasta José Colombres. Los trabajos duraron seis meses. 
 
ago/2006
comienzan a notarse hundimientos en córdoba y muñecas
Los comerciantes de la zona pusieron el grito en el cielo cuando volvieron a ver, tres años después, las máquinas instaladas en la esquina de Córdoba y Muñecas. Es que tres años antes soportaron las flacas ventas durante los seis meses que había durado la obra. Pero esta vez no sería para tanto. En agosto de 2006 la calzada volvió a hundirse en la intersección de Córdoba y Muñecas y obligó a la nueva empresa Sociedad Aguas del Tucumán (SAT) a excavar seis metros para investigar qué ocurría. Temían que pudiera ser nuevamente el colector principal que habían reemplazado en 2003. Tras indagar, concluyeron que uno de los caños de cloaca que desemboca en la boca de registro ubicada en esa esquina se había desencajado, socavando lentamente el sector. La calle estuvo cortada por tres semanas.
 
jul/2007
advierten nuevos hundimientos en córdoba al 500 y en noviembre comienzan a excavar
En julio de 2007 el gerente de la SAT, Alfredo Calvo, admitió que el pavimento en la cuadra del Correo (Córdoba al 500) se estaba hundiendo y que era imprescindible comenzar a excavar. Con la experiencia de años anteriores, en los que las reparaciones enfurecieron a los comerciantes, esperaron hasta noviembre para comenzar las excavaciones para investigar qué ocurría. En un primer momento se pensó que nuevamente el colector cloacal, a seis metros de profundidad, era el que había fallado, pero concluyeron que lo que se había hundido era la boca de registro de Córdoba y 25 de Mayo. Según la explicación de Augusto Guraiib, gerente de Obras de la compañía, el desplazamiento se debió a que en la reparación de 2003 usaron un suelo de sustento que no era el adecuado.
 
nov/2008
un caño roto de un edificio agitó el fantasma de los hundimientos en la calle
En noviembre de 2008 el pavimento de Córdoba al 400 comenzó a hundirse. Es la misma cuadra en la que se abrió el abismo el viernes pasado. En un principio pensaron que podría ser nuevamente un colector cloacal, a pesar de que pertenece a una red distinta a la del desagüe de Córdoba al 500. Precisamente, en la esquina de Córdoba y 25 de Mayo hay una boca de registro que conecta los dos sistemas, el que va por Córdoba hacia el oeste -el que causó problemas desde 2003- y el que va por Córdoba hacia el este. El problema fue mucho menor y estuvo reparado al poco tiempo: la falla había sido ocasionada por la rotura de un caño de agua del edificio ubicado en Córdoba 410. El hundimiento fue detectado el martes y estuvo reparado el viernes de la misma semana. 
 
jun/2016
el viernes, durante un feriado y en pleno congreso eucarístico, se abrió el abismo
La Municipalidad, el Gobierno provincial y todos los organismos públicos quisieron mostrar la mejor cara de Tucumán durante el Congreso Eucarístico Nacional, pero el submundo de la ciudad jugó una mala pasada. El viernes, alrededor de las 9.30, un ómnibus de la línea 8 se acercaba a su parada en la Córdoba al 400 cuando el conductor y los pasajeros sintieron un movimiento brusco en la parte trasera de la unidad. Cuidadosamente bajaron y se asombraron al ver que un cráter se había abierto debajo del colectivo, que quedó milagrosamente agarrado entre la rueda y el paragolpes trasero. Seis horas después pudieron sacarlo. La SAT adujo que una “napa freática muy activa” socavó el suelo, aunque también encontró una fisura en el ducto cloacal. La calle estará cortada hasta el miércoles de la semana que viene. 

feb/2003
Córdoba al 500 luce como una sucesión de lomos de burro

El problema era insoslayable: la calle Córdoba se estaba hundiendo severamente, sobre todo a la altura del 500 (entre 25 de Mayo y Muñecas). Obras Sanitarias, la empresa que entonces tenía la concesión del agua, admitió su preocupación. Temían que se produjera un desastre en la zona, por lo que pidió a la Municipalidad que modificara el recorrido de los ómnibus para quitar algo de peso a la transitada arteria céntrica. La situación fue consignada en la edición de LA GACETA del 20 de febrero y el 25 comenzaron las excavaciones para investigar de qué se trataba. La rápida reacción permitió que no hubiera que lamentar accidentes graves, y también puso al descubierto el serio problema de un colector cloacal que se encontraba saturado. La solución fue colocar una cañería subsidiaria entre 25 de Mayo hasta José Colombres. Los trabajos duraron seis meses.

Ago/2006
comienzan a notarse hundimientos en Córdoba y Muñecas

Los comerciantes de la zona pusieron el grito en el cielo cuando volvieron a ver, tres años después, las máquinas instaladas en la esquina de Córdoba y Muñecas. Es que tres años antes soportaron las flacas ventas durante los seis meses que había durado la obra. Pero esta vez no sería para tanto. En agosto de 2006 la calzada volvió a hundirse en la intersección de Córdoba y Muñecas y obligó a la nueva empresa Sociedad Aguas del Tucumán (SAT) a excavar seis metros para investigar qué ocurría. Temían que pudiera ser nuevamente el colector principal que habían reemplazado en 2003. Tras indagar, concluyeron que uno de los caños de cloaca que desemboca en la boca de registro ubicada en esa esquina se había desencajado, socavando lentamente el sector. La calle estuvo cortada por tres semanas.

Jul/2007
Advierten nuevos hundimientos en Córdoba al 500 y en noviembre comienzan a excavar

En julio de 2007 el gerente de la SAT, Alfredo Calvo, admitió que el pavimento en la cuadra del Correo (Córdoba al 500) se estaba hundiendo y que era imprescindible comenzar a excavar. Con la experiencia de años anteriores, en los que las reparaciones enfurecieron a los comerciantes, esperaron hasta noviembre para comenzar las excavaciones para investigar qué ocurría. En un primer momento se pensó que nuevamente el colector cloacal, a seis metros de profundidad, era el que había fallado, pero concluyeron que lo que se había hundido era la boca de registro de Córdoba y 25 de Mayo. Según la explicación de Augusto Guraiib, gerente de Obras de la compañía, el desplazamiento se debió a que en la reparación de 2003 usaron un suelo de sustento que no era el adecuado. 

Nov/2008
un caño roto de un edificio agitó el fantasma de los hundimientos en la calle

En noviembre de 2008 el pavimento de Córdoba al 400 comenzó a hundirse. Es la misma cuadra en la que se abrió el abismo el viernes pasado. En un principio pensaron que podría ser nuevamente un colector cloacal, a pesar de que pertenece a una red distinta a la del desagüe de Córdoba al 500. Precisamente, en la esquina de Córdoba y 25 de Mayo hay una boca de registro que conecta los dos sistemas, el que va por Córdoba hacia el oeste -el que causó problemas desde 2003- y el que va por Córdoba hacia el este. El problema fue mucho menor y estuvo reparado al poco tiempo: la falla había sido ocasionada por la rotura de un caño de agua del edificio ubicado en Córdoba 410. El hundimiento fue detectado el martes y estuvo reparado el viernes de la misma semana.

Jun/2016
El viernes, durante un feriado y en pleno Congreso Eucarístico, se abrió el abismo 

La Municipalidad, el Gobierno provincial y todos los organismos públicos quisieron mostrar la mejor cara de Tucumán durante el Congreso Eucarístico Nacional, pero el submundo de la ciudad jugó una mala pasada. El viernes, alrededor de las 9.30, un ómnibus de la línea 8 se acercaba a su parada en la Córdoba al 400 cuando el conductor y los pasajeros sintieron un movimiento brusco en la parte trasera de la unidad. Cuidadosamente bajaron y se asombraron al ver que un cráter se había abierto debajo del colectivo, que quedó milagrosamente agarrado entre la rueda y el paragolpes trasero. Seis horas después pudieron sacarlo. La SAT adujo que una “napa freática muy activa” socavó el suelo, aunque también encontró una fisura en el ducto cloacal. La calle estará cortada hasta el miércoles de la semana que viene.