Para agendar
n  Desde las 15 del jueves 16 hasta las 15 del domingo 19 se realizará una Adoración Perpetua en el templo.
n Viernes 17, a las 20.30, conferencia del presbítero Ernesto Salvia sobre “Los procesos del Bicentenario en la independencia argentina”.
n Sábado 18, a las 20.30, el presbítero Ernesto Salvia disertará sobre “La obra del obispo Colombres en la independencia argentina”.
n El sábado 18, a las 10, concelebración de ritos orientales. Luego los sacerdotes rendirán un homenaje en la Casa Histórica.

Para agendar
-  Desde las 15 del jueves 16 hasta las 15 del domingo 19 se realizará una Adoración Perpetua en el templo.
- Viernes 17, a las 20.30, conferencia del presbítero Ernesto Salvia sobre “Los procesos del Bicentenario en la independencia argentina”.
- Sábado 18, a las 20.30, el presbítero Ernesto Salvia disertará sobre “La obra del obispo Colombres en la independencia argentina”.
- El sábado 18, a las 10, concelebración de ritos orientales. Luego los sacerdotes rendirán un homenaje en la Casa Histórica.



¡Pasen y vean! La Catedral recibe los últimos retoques para mostrarse al país esplendorosa e íntegramente iluminada. La iglesia matriz será uno de los cinco templos que participarán activamente en el XI Congreso Eucarístico Nacional que se desarrollará del 16 al 19 en Tucumán. San Francisco, San Roque, Santo Domingo y La Merced también serán escenarios del máximo encuentro del Bicentenario, pero en ningún caso se hicieron tantas obras de remodelación como en el principal templo de la ciudad. La municipalidad de la capital se ocupa en estos días de pintar la fachada y de renovar la iluminación del frente para que luzca impecable para el día de la inauguración del congreso.

Los trabajos de remodelación de la Catedral tienen una pequeña historia. El año pasado el párroco Marcelo Barrionuevo había acordado con autoridades nacionales un proyecto de mejoramiento de la iglesia que nunca se concretó. “En octubre cambiaron las autoridades y el presupuesto nunca se llegó a aprobar, por lo tanto la Catedral no recibió un peso”, aclara el presbítero. Ante la inminencia de las celebraciones bicentenarias el párroco afrontó los trabajos de pintura y limpieza “con ayuda de la limosna, la colaboración de empresarios y la generosidad de los pintores que aportaron su mano de obra”, consignó el sacerdote.

Se pintó el interior del templo, se recuperaron las luminarias y se hizo la limpieza de altares laterales y pulido de bronces.

Para arreglar la parte externa del templo, el padre Barrionuevo pidió la colaboración de la Municipalidad de la capital. La repartición puso los materiales y la mano de obra para pintar la fachada y cambiar los focos, que harán lucir al templo totalmente iluminado los días que dure el congreso y las fiestas del bicentenario.

Los cuatro relojes de la torre del templo también están reparados y funcionan bien. Además se hizo un trabajo de impermeabilización de las azoteas. La capilla del baptisterio ha quedado como nueva. Se recuperó el órgano centenario, que todavía acompaña todas las celebraciones. Y se han ido comprando las piedras de liturgia: vasos sagrados, casullas y candelabros. “En 1858 había 70 candelabros, cuando me hice cargo de la Catedral había solo cuatro”, comenta el párroco.

La llamada también “Catedral de las 100 columnas” está recuperando su campanario. Podrá participar de un “concierto de campanas” de 15 minutos junto con los templos vecinos cada vez que comiencen las procesiones del marco del congreso.

Imágenes históricas

En la Catedral están expuestas las imágenes de los dos copatrones de la arquidiócesis de Tucumán, San Simón y San Judas Tadeo, que son de la época colonial. A la izquierda se levanta la imponente figura de San Miguel Arcángel, que junto con el altar de la Virgen de Guadalupe necesitan una restauración, en opinión del padre Barrionuevo.

“Nuestro arzobispo (monseñor Alfredo Zecca) inició gestiones con Obras Públicas de la Nación y con la Dirección Nacional de Arquitectura, como también con un grupo de la Universidad para iniciar un proceso de restauración a fondo de cubiertas, altares y nueva iluminación exterior con torres y no con artefactos empotrados a la pared”, explicó el sacerdote.

El padre Marcelo sonríe: “Estoy tranquilo. Estamos en condiciones de mostrarles a los peregrinos del país las bellezas de nuestro templo”.