Los integrantes de un dispositivo territorial de salud del Ministerio de Desarrollo Social en Costanera Norte protestaron en la sede de la Secretaría de Adicciones por la quita de un subsidio alimentario destinado para adictos en tratamiento. Los manifestantes fueron recibidos por Braulio Fanlo, director de Asistencia de la secretaría.

"Nosotros cobramos una beca o subsidio de $ 850 por mes. Se trata de un monto para los integrantes del dispositivo de salud que avanzamos en nuestra recuperación y nos sirve de sostén para comprar comida (porque tampoco es mucho dinero) porque es muy difícil conseguir trabajo", explicó Carlos Díaz.

El joven, que se desempeña como tallerista del equipo del Centro Preventivo Local en Adicciones (Cepla), explicó que el subsidio significa una pieza vital en la estrategia del dispositivo terapéutico. El Cepla se encuentra en construcción desde hace tres años, pero el equipo profesional ya se desempeña en territorio.

El funcionario recibió al grupo, que acudió en compañía de dos integrantes de Madres del Pañuelo Negro. Explicó que se trata de un cambio en la forma de trabajo y que los subsidios serán sustituidos por capacitaciones laborales, en vistas a que se inserten en el mercado laboral.

Las Madres del Pañuelo Negro, sin embargo, se mostraron reticentes. "Nuestros hijos llevan muchísimas capacitaciones, pero al final los proyectos se caen y ellos siguen sin trabajo. No pueden ser vendedores ambulantes porque los corren, no pueden cartonear porque nos sacan el caballo del carro... Sin trabajo serio no tenemos proyecto de vida", reclamó Blanca Ledesma.