A paso firme, Huirapuca fue abriéndose camino por el cuadro del Interior B hasta llegar a la final. No se trata de una escenario desconocido para los concepcionenses, que ya saben lo que es ganar el torneo de ascenso: lo hicieron dos veces, ambas ante rivales cordobeses. La primera fue en 2009, de visitante ante Córdoba Athletic, y la más reciente en 2012, cuando venció a Tala en “La Perla del Sur”. Precisamente allí será donde el sábado buscará su tercera conquista, aunque el rival no será de “La Docta” ni de ningún otro punto del país: será Old Christians, uno de los dos clubes uruguayos invitados.

“Venimos a pasos firmes encontrando el juego, y sobre todo encontrándonos como equipo y como grupo. Esperamos esta final con muchas ganas de ser protagonistas y plasmar lo que venimos entrenando. Una final no se juega todos los días, y menos en casa, así que hay un gran ambiente en el club, digno de ser disfrutado a full”, trazó un panorama actual Lucas Belloto.

Por tratarse de un rival extranjero, resulta casi un misterio lo que se puede esperar de él. “Sabemos que tiene un par de jugadores que estuvieron en el Mundial. Son duros en el contacto, tienen un buen scrum, un pateador efectivo y un juego que tal vez sea un poco pausado, pero son de marcar muchos puntos”, analizó el wing.

Ese halo de incertidumbre refuerza la idea de respetar a rajatabla el libreto propio. “La llave va a estar en plantear un juego variado, en el que la dinámica le pueda generar inconvenientes. Ser duros en el contacto, mover la pelota con los backs y tener obtención con los forwards. La defensa es una de las banderas de este equipo. No tiene que bajar la intensidad, y menos en una final”, cerró Lucas.