En la reunión de gabinete que encabezó el presidente Mauricio Macri, ayer en el Centro Cultural Kirchner, hubo reproches para José Cano. El jefe de Estado, mientras se refería al Plan Belgrano, desvió la atención con una chicana: calificó al tucumano como un mal jugador de fútbol al consignar que en cada picado del que participa lesiona a algún ministro.

Cano, quien sonrió ante la chanza, participa habitualmente de los partidos que se organizan en la Quinta de Olivos entre hombres del gabinete. Suele desempeñarse como marcador central, desde donde supo gestar su fama de áspero ante sus pares. Según trascendió, ya habrían sufrido su férrea marca el ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay; y el de Modernización, Andrés Ibarra.