Un equipo de médicos tucumanos del hospital del Niños operó a una nena de cinco años utilizando una técnica novedosa. El objetivo fue revertir las secuelas complejas que le habían quedado tras un accidente.

Martín Fontana, médico del servicio de Otorrinolaringología del hospital, explicó que la cirugía en la cabeza de la niña solucionó el problema de pérdida de líquido cefalorraquídeo a través de la fosa nasal. Ese líquido es esencial para el buen funcionamiento del cerebro y la médula espinal. Su falta o alteración puede causar distintas enfermedades, como meningitis.

Ricardo Marengo, consultor de las fundaciones Favaloro y Fleni, que colaboró en la operación, detalló “la cirugía es mínimamente invasiva y busca disminuir los riesgos respiratorios y de sufrimiento post-operatorio, sin generar cambios estéticos”.