El papa Francisco comparó ayer la situación de los refugiados sirios y norafricanos en Europa con la indiferencia que padeció Jesús según los relatos bíblicos. El jefe de la Iglesia lamentó que muchas personas no asuman el compromiso con los refugiados, al presidir la celebración litúrgica del Domingo de Ramos en el Vaticano

“A Jesús se le negó toda vía hacia la justicia”, afirmó el pontífice en su reflexión del texto evangélico desde la plaza San Pedro. “Sufrió carne propia la indiferencia porque nadie quiso tomar responsabilidad por su destino. Pienso en tantos marginados, en tantos refugiados y también en tantos que no quieren asumir la responsabilidad de su destino”, aseveró el Pontífice, en clara alusión a sirios y norafricanos que intentan llegar a Europa y muchas veces son expulsados por las autoridades. Por último, animó a los peregrinos presentes en San Pedro a vivir con intensidad espiritual la Semana Santa.

En Argentina

En Buenos Aires, miles de personas dieron continuidad a una iniciativa que había tenido Francisco cuando era arzobispo. Un nutrido grupo de misioneros salió por los barrios porteños en una procesión que culminó con una misa frente a la basílica de San José de Flores.

Obispos, sacerdotes y fieles salieron desde la mañana a las calles y plazas en todas las ciudades del país para bendecir a comercios y transeúntes, a quienes se les obsequió ramos de olivos y estampas.

La iniciativa llevó por lema “Nunca deja de amarnos” y tuvo como objetivo hacer de las ciudades “santuarios donde todos puedan encontrarse con el amor de Dios”.