Emiliano Vargas Aignasse ya había desistido de la fuga. Parado junto a su camioneta Toyota Hilux blanca de doble cabina, el legislador oficialista decidió entonces dialogar con los policías de Santiago del Estero que le habían dado alcance. Les explicó que había intentado eludir el control vial porque no llevaba consigo el carnet de manejo. Y les advirtió que formaba parte del Poder Legislativo tucumano. “Si me ayudan, yo los voy a ayudar económicamente”, lanzó Vargas Aignasse, según consta en el expediente judicial.

El supuesto ofrecimiento de dinero se produjo en los primeros minutos del 26 de enero. Tras una persecución de unos 18 kilómetros, que comenzó en suelo santiagueño y culminó en la localidad tucumana de Los Puestos, los uniformados requisaron la Toyota Hilux del parlamentario afín a la Casa de Gobierno. En el asiento trasero, dentro de una bolsa de nylon, encontraron 47 gramos de marihuana.

El dirigente peronista y la joven de 22 años que lo acompañaba quedaron imputados por presunta infracción a la Ley Nacional de Drogas, a disposición del juez federal Guillermo Molinari, de Santiago del Estero.

A 23 días de su escandalosa detención, en la Legislatura hay consenso para suspender a Vargas Aignasse durante cuatro meses, sin derecho a cobrar su dieta ni gastos sociales.

Hoy, a partir de las 8, sus pares decidirán en el recinto de sesiones si corresponde el inédito castigo para el presidente de la comisión de Legislación General.

El mecanismo para sancionar a un integrante del cuerpo colegiado consta en el artículo 58 de la Constitución provincial. “La Legislatura dicta su reglamento. Podrá con dos tercios de votos corregir a cualquiera de sus miembros, por desorden de conducta en el ejercicio de sus funciones o removerlo por inhabilidad física o moral sobreviniente a su incorporación, y hasta excluirlo de su seno”, indica la Carta Magna.

El martes pasado, la comisión de Asuntos Constitucionales e Institucionales de la Cámara analizó el caso de Vargas Aignasse. El justicialista había solicitado una licencia de 100 días, pero el pedido fue desechado. Tras analizar los informes del caso y la cuestión de privilegio planteada por Alberto Colombres Garmendia, los oficialistas Marcelo Caponio, Ramón Santiago Cano, Zacarías Khoder y Luis Morghenstein, y los opositores Stella Maris Córdoba (peronista disidente), Claudio Viña (Fuerza Republicana), Eduardo Bourlé (Trabajo y Dignidad) y José Canelada (UCR) arribaron a un consenso. Así, emitieron un proyecto de resolución que aconsejaba la suspensión por 120 días de Vargas Aignasse. En la sesión de hoy, el dirigente capitalino -hermano de la secretaria de Gobierno y Justicia del Poder Ejecutivo, Carolina Vargas Aignasse- tendrá la oportunidad de ejercer su derecho a defensa en el recinto.

Si dos tercios de los legisladores presentes se expresan a favor de la sanción, el hombre que secundó al vicepresidente primero Guillermo Gassenbauer en el acople “Tucumán en Positivo” deberá abandonar el salón de debate. Según los antecedentes recolectados por la comisión de Asuntos Constitucionales e Institucionales, el caso no tiene precedentes en la historia reciente del Poder Legislativo.

En paralelo, Vargas Aignasse afronta una causa penal en Santiago del Estero por presunta infracción a la Ley Nacional de Drogas (N° 23.737). El juez federal Molinari, al día siguiente del arresto del legislador, dispuso que él y su acompañante fueran liberados. Interpretó que, debido a la cantidad de marihuana secuestrada, no correspondía el dictado de la prisión preventiva.

Según fuentes de los Tribunales santiagueños, Vargas Aignasse y su compañera de viaje ya prestaron declaración indagatoria. El oficialista designó como defensor al abogado Lucas Vieyra Ortiz, de esa provincia.

Los policías que intervinieron en el arresto del parlamentario afín a la Casa de Gobierno también brindaron su relato como testigos ante el fiscal federal Pedro Simón, de Santiago del Estero. El oficial Diego José Luis Cardozo, de la Policía santiagueña, expresó que cerca de la medianoche del 26 de enero estaba realizando un control con sus compañeros de la Dirección de Drogas Peligrosas en la ruta 9, a la altura de Yutu Yacu (cerca de Las Termas de Río Hondo). Según dijo, vio una Toyota Hilux blanca que se acercaba y que, imprevistamente, dio la vuelta en “U”, en dirección a Tucumán. Tras una persecución, la camioneta se detuvo en la localidad de Los Puestos. Según Cardozo, Vargas Aignasse advirtió que era legislador de esta provincia. Señaló que, tras el hallazgo de la droga, el dirigente capitalino le manifestó que se trataba de “marihuana para consumo personal”. “Nuevamente, el conductor del rodado insistió con que era legislador de San Miguel de Tucumán (sic), que tenía una imagen pública y que, si lo ayudaban, él también los iba a ayudar económicamente”, relató el oficial Cardozo en los Tribunales santiagueños. Los policías no aceptaron la supuesta oferta de Vargas Aignasse, según la declaración, y trasladaron por orden de sus superiores a los dos aprehendidos y a la Toyota Hilux al puesto de Yutu Yacu. Allí, ante más testigos, se requisó la camioneta. Además, un perro adiestrado buscó más estupefacientes, pero no detectó nada. Por todo esto, el legislador oficialista podría sufrir hoy el peor revés en su carrera como dirigente político.