Dicen que por momentos la mesa del Consejo Superior, una inmensa y señorial tabla de madera maciza, se parecía más a un diván de psicoanalista que a un sitio de trabajo. “Los decanos hicieron catarsis”, sintetizó un testigo presente.

Ayer los titulares de las 13 unidades académicas de la UNT se reunieron en la sala del Consejo Superior para tratar la distribución del presupuesto 2016. Presidió el vicerrector, José García, y también participaron funcionarios del área Económica y Administrativa. La reunión estaba programada para las 8, pero recién comenzó a las 9.05 y se extendió por un poco más de tres horas.

A las 11 estaba previsto un acto por los 12 años de la carrera de Educación Física, pero la intensidad del debate no permitió que se levantaran los que debían asistir.

Las declaraciones de cuatro decanos publicadas en LA GACETA acerca de la falta de designaciones docentes y de presupuesto para obras de mantenimiento ocupó parte de la reunión. Como también la respuesta que emitió el Rectorado sobre las declaraciones de la decana de la facultad de Derecho, Adela Seguí, acerca de la falta de transparencia que tiene la UNT en el manejo de fondos y las altas pendientes de los docentes de esa unidad académica. Imposible pasar estos temas por alto, sobre todo porque algunos cargaron bajo sus brazos el ejemplar del diario del día para discutir con el texto en mano.

También se cuestionó la diferencia entre lo que recibe un área y otra, en especial, la porción que le toca al Rectorado.

Terminada la reunión, muchos prefirieron responder con evasivas o con gestos. Algunos con un escueto “esto no se va a resolver” y otros, por el contrario, con un tranquilizador “no pasó nada que no haya sucedido antes”. Lo cual dejaba en evidencia la falta de consenso y las distintas perspectivas que cada decano tiene de la situación que atraviesan.

El vicerrector confirmó que se llegó a un acuerdo, no unánime, pero votado por la mayoría. “Hemos acordado recomendar a la rectora que haga una resolución ad referéndum para poner en funcionamiento el presupuesto desde el 2 de enero y que en febrero seguiremos conversando la mejor distribución presupuestaria”, dijo.

La administración 2016 recibirá de la Nación casi $ 2.500 millones. “De ese monto casi todo se va en salarios y solo queda un margen de $ 10 millones para repartir entre las unidades académicas y las escuelas”, explicó García. Agregó que se garantizará una distribución según lo que le corresponda a cada área. “Tampoco hay tanto margen de acción”, agregó.

- ¿La UNT está desfinanciada?

- La Universidad tiene un déficit de $ 37 millones y el dilema es cómo achicarlo.

- ¿Qué pasará con las designaciones docentes que se hicieron?

- Hay dos resoluciones del año 95 que dicen que cada persona que firma un nombramiento es responsable por el acto y por el presupuesto que dispone. No solo nosotros, también los decanos.

- ¿Esto qué significa?

- Los decanos dicen que han actuado bien; eso es lo que estamos viendo. Es por eso que en el próximo Estatuto (N. de la R.: la Carta Magna de la Universidad que está en período de reforma) no queremos los cargos interinos.

- Pero algunos vienen desempeñándose desde hace meses...

- El problema es que nombrás interinos porque te dicen que hay presupuesto y resulta que no es así.

- ¿Qué sucede con Derecho, que tiene más de 100 docentes en esa situación?

- La decana planteó que tenía la información de que contaba con presupuesto, pero nosotros vamos a ver si la información de ella es la misma que tenemos nosotros. Por eso no queremos interinos, porque nos encontramos con toda esa cantidad que hay que revisar. Lo que espero es que todas las unidades académicas tengan presupuesto y podamos regularizar la planta.