Dos vocales de la Corte Suprema de Justicia de la provincia, René Goane y Antonio Estofán, cuestionaron en sede administrativa la designación de Claudia Sbdar como vicepresidenta del cuerpo. Contra esa decisión adoptada con los votos del presidente Antonio Gandur, de Daniel Posse y de la propia Sbdar, Estofán y Goane -habían sufragado en disidencia- articularon un recurso de reconsideración, presentación que prepara la vía para iniciar un juicio. Se trata de una situación nunca vista, que coloca a la cúpula judicial de Tucumán en un estado de máxima tensión.

La impugnación incluye la recusación con causa de Sbdar y de Gandur. “Recusamos también a Gandur por haber propuesto a la antes nombrada (como vicepresidenta) induciendo a error al tercer vocal que la votara (Posse)”, indica el escrito que ingresó a la Secretaría de Superintendencia de la Corte el 10 de diciembre.

Ante el silencio que guardó la mayoría frente a la propuesta de discutir nuevamente el asunto, Goane y Estofán declararon que no podían tolerar la violación a la ley que suponía la elección de Sbdar como vocal decana. Según los recurrentes, tal decisión contiene múltiples vicios y es nula de nulidad absoluta. Estofán y Goane reconocieron que su recurso implicaba el riesgo de que la imagen de la Corte se viese “conmovida” por el escándalo.

Si bien Estofán y Goane consideraron innecesario explayarse sobre el currículum del segundo, entendieron que correspondía afirmar y acreditar que su vida profesional había transcurrido entre la docencia y la judicatura: “(Goane) depositó su empeño en el estudio, la investigación, el sometimiento a la ley y a las reglas de la moral pública”. A continuación, entraron en el meollo del conflicto: la interpretación del artículo 11 de la Ley Orgánica del Poder Judicial. Los impugnantes razonaron que la cláusula dice que sólo puede ser vocal decano el de mayor antigüedad o edad. Y expresaron que con Gandur en la presidencia, ambos caminos llevan a Goane y no a Sbdar.

(No) es cuestión de género
Goane y Estofán dijeron que la Corte sólo podía dejar de lado al vocal de más edad o antigüedad si este renunciaba del derecho que le confiere la ley.

El recurso de reconsideración manifiesta que el nombramiento de Sbdar carece de motivación razonable: “las expresiones de Gandur (el acta de la votación refleja que dijo que votaba a Sbdar por sus condiciones y versación jurídica, y, también, por una perspectiva de género), amén de ser a título personal, no resisten el test de razonabilidad que justificara apartarse de la ley expresa, que no distingue por razones de género”.

Los vocales impugnantes reflexionaron que el cambio de criterio respecto de la elección del vocal decano obedeció a la necesidad de destrabar la renovación de autoridades del alto tribunal.

El 25 de noviembre, la mayoría sacó al alto tribunal del cono de indefinición cuando, por la falta de acuerdo, se vio obligado a levantar dos veces la votación y a prorrogar los mandatos vencidos. La elección interna dio la reelección al presidente Gandur; convirtió a Sbdar en la primera mujer que accede al cargo de vocal decana o vicepresidenta, y concedió a Posse el aval para volver al Consejo Asesor de la Magistratura (CAM). Además de presidir la Junta Electoral Provincial, Gandur será integrante del Jurado de Enjuiciamiento mientras que Sbdar conducirá el Centro de Especialización y Capacitación Judicial. Todos los mandatos vencen en 2017.

“El intercambio (de votos en la mayoría) destrabó una elección empantanada”, expresaron Goane y Estofán, que hicieron reserva de acudir incluso ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación.