Los usuarios del transporte público de la capital seguirán pagando $ 4,83 por viaje, por lo menos hasta que termine 2015. Así lo afirmó el concejal José María Franco, vicepresidente de la comisión de Transporte del Concejo Deliberante. El edil descartó que el pedido de aumento de los empresarios del sector se trate dentro de las tres semanas que quedan de diciembre. Además, los tres bloques del órgano legislativo municipal anticiparon que analizarán el pedido con serenidad.

“Se descarta que se trate (el aumento) este año por dos razones: ya terminamos el período de sesiones ordinarias y el Concejo no puede sesionar a menos que sea en extraordinaria; y porque tenemos que ser responsables y tener en cuenta las medidas económicas del nuevo Gobierno nacional”, indicó el edil que integra el bloque del Acuerdo para el Bicentenario (ApB). Aclaró, sin embargo, que se analizará en profundidad el pedido en la comisión de Transporte.

La semana pasada, desde la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat), entidad que reúne a los propietarios de las 14 líneas de ómnibus, reclamaron al órgano una suba en el precio del boleto. Citando un estudio de costos realizado por la UNT, solicitaron una suba del 83%: de $ 4,83 a $ 8,90. Pidieron también un aumento en los subsidios o que se los beneficie con una reducción con las cargas impositivas. “Sabemos que es un incremento muy importante, pero estamos abiertos al diálogo y a negociar una tarifa (más baja), pero con algún tipo compensación económica”, había advertido Daniel Orel, titular de Aetat.

La comisión de Transporte de la nueva conformación del Concejo, presidida por Rodolfo “Johny” Ávila (ApB), había recibido hace dos semanas a Orel y a dueños de empresas de colectivos urbanos. En ese momento, el presidente de Aetat había manifestado a LA GACETA que el sector se encuentra en crisis. “El transporte público esta en una situación crítica porque en todo 2015 no fue prudente otorgar un aumento de la tarifa. Estamos con un desfasaje tarifario muy importante”, había expresado.

Los jefes de los bloques del Frente para la Victoria (FpV) y de Fuerza Republicana (FR) anticiparon su rechazo ante el eventual tratamiento de un aumento en el precio del boleto. La oposición en el Concejo está conformada por nueve ediles: siete del FpV y dos del bussismo. El manzurista Dante Loza anticipó que la postura de la bancada es apoyar un aumento de subsidios al sector, pero no así un ajuste del boleto. “Hay que sentarnos y elaborar una respuesta para los empresarios, pero que no impacte sobre el bolsillo de los trabajadores”, consignó el edil.

Ricardo Bussi, por su parte, indicó que rechazan el potencial aumento del boleto porque la Municipalidad cuenta, desde la última sesión, con una ampliación presupuestaria y con un aumento del 30% en varios cánones (a raíz del aumento del Urbano, la unidad de medida de los tributos).