BUENOS AIRES.- Según la candidata a vicepresidenta del frente Compromiso Federal, Liliana Negre de Alonso, el desafío del domingo 25 para el espacio que lidera Adolfo Rodríguez Saá es convencer al votante de que elija a quienes “tienen un proyecto de país” y no a los instalados “por los medios”. Aquí, la entrevista con DyN.

- ¿Cómo analiza la campaña?

- Va muy bien. Con Adolfo, estamos recorriendo el interior con nuestras propuestas. Somos la única fuerza con candidatos del interior; las demás tienen una mirada desde el Puerto. Si hay balotaje, y nos toca quedar afuera, nuestro voto será para quien se comprometa a aplicar nuestro proyecto.

- ¿Cuáles son esas ideas centrales para ustedes?

- Tenemos dos pre-proyectos. Uno declara la emergencia de las economías regionales; el otro es de promoción de esas economías. Nuestro proyecto político se basa en promover la producción, el pleno empleo, eliminar la pobreza y concretar un plan federal de viviendas sociales: 500.000 al año.

- ¿Qué otras prioridades?

- Tomamos un plan de la Sociedad Rural para crear 700.000 puestos de trabajo y poner en marcha la capacidad ociosa de campo.

- ¿Implica bajar retenciones?

- Con baja de retenciones, pero promoviendo las actividades del campo. Por ejemplo, hoy el sector lechero está al borde de la quiebra. Hay que hacer lo que no se hizo: sacar las retenciones; promover la tecnificación para que haya más producción; y generar un fondo anti-cíclico para enfrentar los periodos de vacas flacas. Así se hace en EEUU, en Canadá. Hay que incorporar valor agregado a los productos del campo.

- ¿Cómo debe ser el rol del vicepresidente?

- Para mí el rol del presidente del Senado es muy importante. Tiene la tarea administrativa del Cuerpo. Es decir, debe disponer los medios para que se pueda legislar de la mejor manera. Hay que trabajar en la incorporación de tecnología con el objetivo de que el legislador pueda conocer e interactuar con las jurisdicciones del mundo para elaborar la mejor y más actualizada legislación. Si bien el presidente del Senado no es un senador, debe facilitar el diálogo entre los bloques, para que los proyectos del Ejecutivo se conviertan en leyes.

- ¿Cómo imagina el Congreso que viene?

- Con más actividad. Recuerdo diciembre de 2001, enero y febrero de 2002 -y no es que quiero esa misma situación política y social-: en ese momento, el Congreso pudo garantizar a la Argentina la institucionalidad y la gobernabilidad.

- ¿Qué ocurre ahora?

- Se desprecia el trabajo de los senadores, incluso de legisladores del oficialismo. Y de eso es responsable la Presidenta, a pesar de haber surgido del Congreso. Hay proyectos de legisladores que fueron tomados por el Poder Ejecutivo y presentados como propios, sin reconocer siquiera la autoría de esas iniciativas y el esfuerzo de esos legisladores. También la presidenta es responsable de que gobernar mediante DNU. En Argentina hay inflación de DNU.