Los antropólogos que coordinan las excavaciones en busca de restos de María de los Ángeles “Marita” Verón en una casa ubicada en el Club Náutico de Las Termas de Río Hondo, encontraron ayer una superficie de cemento ubicada a 1,20 metros bajo el suelo. Eso, según explicaron, demuestra que en ese lugar hubo una remoción de tierra.
La anomalía en el terreno había sido detectada en una pericia con un georradar realizada a fines de junio pasado. Ahora, ante el hallazgo de la superficie de cemento, los especialistas comenzaron a trabajar con herramientas de mayor precisión (cinceles y cepillos) para no alterar las posibles pruebas que podrían encontrar. Esto renovó la expectativa de Susana Trimarco, madre de “Marita” Verón, quien por la tarde viajó a Las Termas para acompañar de cerca la excavación.
Fuentes consultadas por LA GACETA explicaron que la superficie irregular de cemento que encontraron los antropólogos tendría unos 40 centímetros de diámetro. La profundidad a la que se encuentra esta carpeta y el reducido tamaño que tiene, hizo que descarten la posibilidad de que se trate de un sistema de aislamiento de humedad -la casa está ubicada a unos 20 metros de un espejo de agua- y que se considere que en ese sitio podría haber un pozo que fue tapado. Esta superficie de cemento está ubicada dentro de la vivienda. A un metro de ese lugar se realiza otra excavación porque el georradar también detectó anomalías en el terreno.
Sin límite de tiempo
Las excavaciones están a cargo de especialistas de la Policía Federal Argentina (PFA) y del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF). Anoche todavía se analizaba si el trabajo iba a continuar o se iba a suspender.
En este sentido Carlos Garmendia, abogado de la fundación “María de Los Ángeles”, señaló que cuentan con la autorización del Juzgado Federal N°2, a cargo de Fernando Poviña, para que los trabajos continúen por el tiempo que sea necesario. “Serán los antropólogos los que decidan cuando se debe terminar”, precisó.
La casa donde se realizan las excavaciones perteneció hasta 2007 a Ángel “El Mono” Ale, hermano de Rubén “La Chancha” Ale. “Marita” desapareció el 3 de abril de 2002, y Trimarco acusa a los Ale de haber sido los responsables del supuesto secuestro de la joven.
La hipótesis de que “Marita” habría sido enterrada en un pozo ciego ubicado debajo de la vivienda, llegó al juez Poviña, quien además investiga a los Ale por un supuesto lavado de dinero proveniente de actividades ilícitas. “El Mono” está detenido en el penal de Villa Urquiza, en tanto que “La Chancha” cumple prisión domiciliaria por su estado de salud (padece mal de Parkinson, obesidad mórbida, diabetes y otras enfermedades).