Por definición, Lince es ese equipo tan capaz de ganarle a los punteros como de perder contra los que vienen a los tumbos. Esa irregularidad patógena, que le terminó costando la clasificación al Súper 8, es lo que lo tiene alternando roles entre cazador y presa a cada fin de semana. Y así, tras ganar cinco de sus últimos seis partidos, volvió a sufrir otra derrota difícil de digerir frente a Tigres, recurrente protagonista de las promociones por la permanencia.

“La derrota ante Tigres creo que nos tiró un poco abajo, porque veníamos muy bien con respecto al juego. Creo que entramos muy light, je”, es la respuesta que supone Ramiro Giménez, una de las piezas nuevas de este modelo “gris” 2015, uno que pese a mostrar una evolución evidente, sigue incurriendo en faltas del pasado.

“Siempre le pasa a Lince. Regalamos un tiempo, y cuando nos despertamos la diferencia de puntos ya es medio complicada de dar vuelta. En el caso particular del partido frente a Tigres, creo que no fue por falta de estado físico, sino por actitud, porque cuando nos proponemos algo y somos frontales. No hay equipo que nos pare. Ya lo demostramos contra los equipos que hoy están en el Súper 8”, pone de relieve el fullback.

Entonces, en el único adelantado de esta fecha 18, Lince saldrá a su campo con la consigna de repetir ante Santiago Lawn Tennis la actuación aplastante con la que lo goleó en el cierre de la fase clasificatoria. “Creo que estamos bien, tuvimos una buena semana de entrenamiento y confiamos en que las cosas van a salir. Ahora nuestro objetivo es mantener lo del año pasado, que es ganar la zona Clasificación. Sino, es un año perdido”, advierte Ramiro. Ezequiel Orcajada será el árbitro en Silvano Bores al 800, donde la acción principal comenzará a las 16.

Mañana se completará la fecha con los otros siete cruces: Los Tarcos-Tucumán Rugby, Huirapuca-Universitario de Salta, Cardenales–Lawn Tennis, Natación-Gimnasia y Tiro, Jockey Club (T)-Old Lions y Tigres-Bajo Hondo.