BUENOS AIRES.- Fue tan extraño el primer tiempo de Franco Sbuttoni que hizo dos goles, uno a favor y otro en contra, como si quisiera recrear el yin y el yang del fútbol. El (doble) problema para el defensor fue que el que anotó en el arco correcto resultó anulado -por inexistente posición adelantada- y el otro -en el arco de Lucchetti- fue válido, por lo que su cuenta personal terminó en desventaja. Sin embargo, en una demostración del carácter que Atlético demostró para revertir el resultado, Sbuttoni jugó con mucha solidez el segundo tiempo y también aportó para un triunfo que el “decano” no conseguía hacía 27 años.
“Punteé la pelota, fue un forcejeo con el 4 de ellos (Maximiliano Paredes), y lamentablemente terminó en gol. Son cosas que te molestan, aunque por suerte faltaba mucho y pudimos revertir el resultado. Nuestro primer tiempo no fue tan bueno, pero en el segundo mantuvimos la presión alta y así llegaron los goles”, manifestó Sbuttoni, mientras sostenía una manzana en la mano, luego del partido. “Necesitábamos ganar. Patronato había ganado y si no sumábamos de a tres íbamos a quedar muy lejos. ¿Si ya es un mano a mano entre Patronato y nosotros para definir el primer ascenso? No creo, también está Santamarina, que perdió esta fecha pero no hay que darlo por muerto”, agregó el defensor, que este año convirtió un gol que valió tres puntos: el que anotó en el descuento ante Juventud Unida, en Gualeguaychú (triunfo 1-0). “Los centrales jugaron a mano a mano casi todo el partido, y eso tiene mucho mérito”, respaldó Juan Azconzábal.
El resultado de ayer, además de haber sido la primera vez que Atlético le hizo tres goles a Chacarita de visitante en todo el historial, fue la segunda victoria en el difícil estadio de San Martín. Para encontrar el triunfo anterior, confirmó Silvio Nava, historiador del club, hay que retroceder 27 años, hasta la temporada 1987/88 de la B Nacional (2 a 1 con goles de Raúl Aredes, el 9 de abril de 1988). Es cierto que, en el medio, Atlético también había superado 2-1 a Chacarita en Buenos Aires, pero fue en la cancha de Argentinos, por la temporada 2009/10 de Primera, con goles de Emmanuel Gigliotti y Johnatan Blanes.
Quien se anotó en el marcador para cerrar el 3-1 de ayer fue Sebastián Matos. “Estoy contento porque fue mi primer gol en Atlético. Me tuve confianza para patear el penal”, dijo el delantero, que aprovechó las ausencias de”Pulguita” y Menéndez (Lucchetti hizo señas para patearlo, pero nadie lo vio), estaban afuera de la cancha.