La interpretación que hace de la performance de la UCR en las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) del 9 de agosto es positiva. O al menos intenta serlo. Ernesto Sanz sostiene que, a pesar de que por primera vez desde el retorno a la democracia esa centenaria fuerza no tendrá candidato presidencial, integra la principal alternativa opositora: el frente Cambiemos, que postula a Mauricio Macri para ocupar el sillón de Rivadavia. Además, el derrotado precandidato no duda de que si se produjese un balotaje, el líder del PRO vencerá a Daniel Scioli.
Sanz acompañó a Macri en la visita que realizó ayer a Tucumán. Lo hizo en calidad de dirigente de la Unión Cívica Radical e integrante de Cambiemos. Cabe recordar que en las PASO del 9 de agosto, él y Elisa Carrió fueron derrotados en la interna de esa alianza por el actual jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
“La adhesión al radicalismo no debe medirse en función de mis votos, sino en función del aporte y la construcción de la única alternativa opositora en la República Argentina. El radicalismo es Cambiemos y Cambiemos es la única alternativa posible para generar un cambio en la Argentina. Nosotros nos sentimos profundamente orgullosos y satisfechos de haber sido constructores y fundadores de este frente”, argumentó Sanz durante una conversación con LA GACETA.
-Pasadas las PASO ¿cómo ven las perspectivas de que se produzca un balotaje?
-Si quedó un dato duro del 9 de agosto es que va a haber segunda vuelta en la Argentina. Puede no haberla si es que ganamos el 25 de octubre. Pero creo que de lo que más cerca estamos es de una segunda vuelta. Y el hecho de que haya una segunda vuelta en la Argentina ya significa un equilibrio extraordinario en el sistema político y el radicalismo ha sido parte de eso.
Hace algunos días, la intelectual Beatriz Sarlo pronosticó que si la candidata a gobernadora por Cambiemos en la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, y el postulante a presidente por UNA, Sergio Massa, declinaban sus candidaturas, Cambiemos se volvería invencible. Con respecto a esto, Sanz se mostró cauteloso. “Son todas elucubraciones válidas, opiniones que yo respeto. Pero creo que las cosas están como están y ya no hay posibilidades de hacer cambios. Legalmente, ya no se los puede hacer. Lo que hay que hacer ahora es ir hacia el 25 de octubre con todas las expectativas. Cada uno tiene que seguir defendiendo lo suyo y en ese esquema puede haber segunda vuelta. Ahí sí vamos a estar todos juntos los que queremos un cambio”, concluyó.