BUENOS AIRES.- La embajadora argentina ante Gran Bretaña, Alicia Castro, aseguró sentirse “orgullosa de representar en el Reino Unido al país que ha sabido darle una patria a los galeses”, y comparó el trato que se le brindó a esa colonia con el que se le dispensará a los habitantes de las Islas Malvinas, a quienes “se respetará como se hizo aquí con los galeses”.
La diplomática arribó ayer a la tarde a Chubut para compartir con las autoridades locales y funcionarios nacionales, en representación de la presidenta, Cristina Fernández, los festejos por los 150 años de la llegada de los colonos galeses a la Patagonia y acompañar al primer ministro galés, Carwyn Jones, y al embajador británico en el país, John Freeman.
“Los galeses hace 150 años salieron desde Liverpool buscando un lugar donde se preserve su identidad, su cultura y su lengua y lo hicieron acá, hermanados con los pueblos originarios, y ahí tenemos lecciones para aprender”, sostuvo la embajadora en diálogo con la prensa local.
Alicia Castro ratificó la pertenencia del país “a una región que está consagrada a la paz y en ese marco es que le reclamamos diálogo al Reino Unido” en torno al tema Malvinas. Además, valoró como “un paso muy importante que esté aquí una autoridad de esta estatura institucional”.
Definió la colonización galesa como “un claro ejemplo de respeto que desarma la propaganda de que la Argentina sería hostil hacia los británicos”, y aseguró que los galeses en la Patagonia “son un ejemplo de respeto”, teniendo en cuenta que Gales es un país constitutivo del Reino Unido. Aseguró que la Argentina respetará a los habitantes de las islas “que seguirán siendo británicos si lo desean”, y explicó que “el problema no es con ellos ni con su cultura, sino con el territorio, y así como se respetó a los galeses en nuestro territorio haremos lo mismo en Malvinas”.
Dijo, además, que “se respetará también su voluntad política pues elegirán a sus propias autoridades y a su Congreso, lo que no ocurre ahora; se les dará participación activa en la política petrolera y pesquera, en suma, vivirán mejor”.
La diplomática aseguró que “en la opinión pública británica también cambió mucho la forma de mirar al tema porque se han dado sobradas muestras de nuestra voluntad de diálogo, pero además muchos no entienden cómo se negoció con las dictaduras más sangrientas y no se puede hablar con un gobierno democrático, que respeta los derechos humanos”.
Recordó que en Chubut hay “50.000 descendientes de galeses y 10.000 que hablan el idioma, lo que se logra únicamente con respeto”. (Télam)