Durante toda la semana pasada, fueron “los turistas varados en Potosí”. Se habían quedado atrapados por una poblada de mineros bolivianos que reclaman mejoras a Evo Morales. Finalmente, los 22 tucumanos y ocho salteños que habían viajado por la agencia de turismo “Bali Hai” pudieron salir gracias a la presión conjunta del coordinador de la agencia, de los ombudsmen de Tucumán y de Bolivia, de Cancillería (del cónsul argentino en Villazón, Juan Tacchetti), de líderes de la protesta, de las Universidades Tomás Frías (Bolivia) y Nacional de Córdoba, y de la Iglesia. Desde Machu Picchu, antes de partir rumbo a Arequipa, le enviaron esta postal a LA GACETA.