La utilización de combis que trasladan a afiliados discapacitados del PAMI en un acto político generó el repudio de dirigentes de La Cámpora y también de algunos legisladores de la oposición. El lunes, el director del organismo en la provincia, Luis Alfredo Larcher, habría usado para la inauguración de una sede camionetas del área de “Traslados Programados”.

El camporista y funcionario del PAMI Federico Casinelli (es coordinador de Políticas Sociales) fustigó a Larcher y reiteró que el actual funcionario ya dejó de pertenecer a la organización ultra K que conduce Máximo Kirchner a nivel nacional.

“Lo que pasó el lunes me deja una sensación amarga, porque se hizo uso de bienes públicos con fines proselitistas. Larcher no sólo ya no está en La Cámpora sino que su separación se produjo porque anteriormente ya tuvo actitudes de este tipo, donde hubo un manejo muy poco transparente de los fondos públicos”, expresó Casinelli.

Respecto a su desvinculación de La Cámpora, el encargado de Políticas Sociales del PAMI relató que oportunamente le solicitaron la renuncia a la organización y a la obra social porque observaron “maniobras poco transparentes” en el seno de la institución.

“Nosotros le exigimos su renuncia pero él decidió amotinarse. Todo el mundo sabe que la Dirección Ejecutiva del PAMI es un cargo político. El llegó de la mano de un proyecto político nacional y se aprovechó de este cargo para un beneficio personal. En el mitin del lunes, Larcher no sólo inauguró una sede, sino que aprovechó la oportunidad para realizar el lanzamiento de su candidatura a legislador utilizando la estructura del PAMI. Es una vergüenza”, fustigó el kirchnerista. “Ya veníamos observando maniobras de este tipo poco transparentes que no tienen nada que ver con la línea ideológica y de conducta que nosotros asumimos en la institución. Y él hizo todo lo contrario. La gestión se hizo más oscura en algunos temas relacionados con la administración de los recursos”, agregó el funcionario.

Desde la Legislatura también cuestionaron el uso de fondos y bienes públicos para realizar proselitismo.

El titular de Fuerza Republicana, Ricardo Bussi, repudió la utilización de vehículos oficiales para un fin político. “El PAMI es una bolsa de empleos muy bien remunerado para la militancia rentada de La Cámpora. Y el uso de combis para actos proselitistas desnuda el poquísimo interés que tienen estos funcionarios en la salud de nuestros viejos. Al igual que el intendente (Domingo) Amaya, y el propio (José) Alperovich, Larcher se ríe a carcajadas de la necesidad de la gente”, expresó el parlamentario.

A su vez, el democristiano José Páez exigió la renuncia de Larcher del organismo. “Es una falta grave, el PAMI tiene sus serias deficiencias y no es posible que el interventor se dé el lujo de hacer actos políticos con los bienes de la institución. Esta es una razón suficiente para que renuncie al cargo o sea reemplazado”, planteó Páez.

Ayer, LA GACETA volvió a intentar comunicarse con Larcher pero el funcionario no contestó los llamados. Por la mañana, el titular del PAMI dialogó con Radio Universidad, y expresó: “nosotros no tenemos nada que ver con eso. Ellos (los prestadores de las combis) se acercaron de manera espontánea. Se acercaron solos. Los que participaron de ese acto son estudiantes universitarios, profesionales. Como dice nuestra Presidenta (Cristina Fernández), son jóvenes que se involucran en la política”.