Pasó hace una semana y las fotos impactaron al país entero. El dique Escaba, ese gigante de agua, parecía a punto de explotar. Una creciente en río Singuil, en Catamarca, puso al límite la estructura del embalse y muchos pensaron que podría haber ocurrido una tragedia. Entonces, rápidamente, la lupa se instaló sobre la seguridad de los diques, los sistemas de vigilancia, los pasos que hay que seguir ante una emergencia. ¿Se hizo todo lo necesario ante una circunstancia de este tipo? ¿Hubo algún descuido por parte de la empresa Hidroeléctrica Tucumán, que administra el dique? Las preguntas se las planteó hasta el propio gobierno tucumano. Para entender un poco más el tema, entrevistamos a Hugo Roger Paz, docente de la UNT y magister en ingeniería hidraúlica de la Universidad de Cantabria (España).
- ¿Era imposible prever lo que ocurrió en Escaba? ¿Antes de la falla técnica, hubo necesariamente una falla humana?
- Estando en un año húmedo, como el presente, se podía prever la ocurrencia de precipitaciones importantes, más aún si existían pronósticos de precipitaciones para la zona norte para ese fin de semana. Era imposible prever exactamente la ocurrencia de la precipitación que generó el llenado del embalse, pero existían probabilidades de que ocurriera, por lo que se tendrían que haber realizado las previsiones del caso.
- ¿Por qué le convendría a Hidroeléctrica mantener una cota tan alta aún cuando se esperaban nuevas lluvias?
- El negocio de Hidroeléctrica Tucumán es la generación de energía eléctrica. La generación de energía en un aprovechamiento hidroeléctrico depende del caudal turbinado (Volumen de agua por tiempo) y de la altura de carga (desnivel entre la cota de embalse y el nivel de descarga en la central). Cuando mayores sean estas variables, se tendrá mayor generación de energía. En este caso, maximizar el nivel de embalse conlleva a una mayor generación.
- ¿Considera que hubo una falta de control de parte del Estado? Según la ingeniería legal ¿las responsabilidades se deberían dividir entre la empresa y el Estado?
- No sabría contestar. Para ello se debería contar con las actas de la Comisión de Embalse y Desembalse para verificar cuáles fueron las instrucciones dadas a Hidroeléctrica, si eran las adecuadas y si las mismas se cumplieron.
- ¿Cómo se fijan o deberían fijarse las cotas máximas que la Comisión de Embalse le indica a Hidroeléctrica?
- Las cotas máximas de embalse se fijan para dos escenarios distintos. El primero corresponde a la época estival. En este caso se pueden producir el ingreso de crecientes importantes al embalse, las cuales conviene atenuar (disminuir su pico máximo) de manera de evitar inundaciones aguas abajo. Para ello se mantiene el embalse a cota 625.56 msnm (un metro por debajo del nivel de la cresta del vertedero). De esta manera se tiene un volumen extra para poder atenuar las crecientes. Esta restricción de nivel aplica hasta el 31 de marzo. El resto del año no hay restricción de cota.
- A partir de este evento, ¿qué aspectos deberían cambiarse o mejorarse para evitar algo similar?
- Para disminuir el riesgo de ocurrencia de un evento similar (el riesgo no se puede anular) se debería realizar un estudio hidrológico de manera de establecer cotas máximas de embalse para cada mes en función de la probabilidad de ingreso de crecientes al embalse. El evento ocurrido habla a las claras de que se pueden producir crecientes importantes más allá del 31 de marzo. De esta manera se tendría un mayor resguardo ante este tipo de sucesos. Asimismo sería conveniente disponer en la cuenca de una red de medición de precipitaciones en tiempo real de manera que se pueda anticipar medianamente el posible ingreso de una creciente cuando el embalse está en niveles altos y actuar en consecuencia.
- ¿Cómo deberían ser los diques tucumanos del siglo XXI?
- El problema del dique Escaba es que el Nivel Máximo Ordinario, es decir el nivel más alto que puede tener el embalse para su operación normal, coincide con el Nivel Máximo Extraordinario (el nivel que alcanza el embalse para la descarga de la creciente de diseño). Esto ocurre sólo en presas con vertederos que tienen compuertas. No ocurre lo mismo en el embalse El Cadillal ni en el embalse La Angostura, los cuales tienen vertederos libres, sin compuerta. El problema de las configuraciones como la de Escaba es que ante una mala maniobra -o incluso un sabotaje- se pude producir la apertura brusca de las compuertas con la consiguiente generación de una creciente enorme aunque no esté ingresando una creciente al embalse. Esto hace que el manejo de las compuertas en esta situación sea mucho más delicada. Los criterios modernos en el diseño de embalses buscan minimizar esta situación haciendo que la creciente que se pueda generar en forma artificial por mal manejo de compuertas no sea superior a la que se da cada 50 años, una creciente relativamente ordinaria, como la que se utiliza para el dimensionado de puentes.
- ¿Qué deberíamos hacer con los pueblos que permanentemente se inundan? ¿Trasladarlos a otro lado? ¿Qué obras podrían protegerlos de las inundaciones?
- El problema de las inundaciones recurrentes de algunos pueblos es un tema difícil de solucionar. No tanto por el lado de la ingeniería, la cual tiene soluciones para estos problemas, sino más bien desde el lado económico y social. Por una parte, las obras que se debieran realizar para mitigar estas inundaciones son de altísimo costo. Eso si hablamos de los pobladores que están concentrados en pueblos, pero también existen casas dispersas lo que hace aún más difícil la solución del problema y por ende eleva el costo de las obras hasta hacerlas en algunos casos imposibles de solventar y justificar en una relación costo-beneficio. Es por ello que se debería realizar un análisis del costo de dichas obras en relación al traslado del pueblo a un lugar más seguro. El problema social viene cuando se piensa en que posiblemente dichos pobladores no quieran abandonar el lugar en donde nacieron y viven. Como se puede ver, la solución es compleja y hace necesaria la intervención de un equipo multidisciplinario que aborde la problemática en todos sus ángulos. De cualquier modo, se debe terminar con el ciclo de inundación-reparación.