BUENOS AIRES.- La Fundación La Alameda denunció que la concejala kirchnerista de San Antonio de Areco y ex directora de Tierras Fiscales de la provincia de Buenos Aires, Angélina Zapico, “es dueña de una red de prostíbulos instalados en el microcentro porteño”.
El escrito asegura que cuatro sociedades de Zapico poseen supuestos bares en el centro de la Ciudad de Buenos Aires, que en realidad son prostíbulos. El más famoso de ellos es el Café Orleans, en Córdoba 499, que está a nombre de Ril SRL, cuyas acciones pertenecen a la concejal. Según la denuncia, la mayoría de las mujeres que trabajan allí son extranjeras. La Alameda exigió “que el Estado se haga cargo de su protección”.
Schaerer acompañó a la denuncia una cámara oculta realizada el 9 de abril en el Café Orleans, donde queda al descubierto la mecánica del lugar, que de acuerdo a la presentación, “contaría con la protección de funcionarios de la Policía Federal”.
La denuncia incluye a otros tres bares que camuflarían la actividad sexual y en cuyas sociedades participa Zapico junto a socios y familiares: Sens, en Paraguay 779, de Jocel SA; Ness Pub, en Suipacha 919, de Loch Ness SRL; y el café ubicado en Reconquista 872, a nombre de Reconquista 872 SRL.
La presentación también menciona a la sociedad Van Kilden SA, de Zapico, cuyo objeto social es “brindar servicios de entretenimiento” y que funcionaba en el séptimo piso de Paraná 754, donde había un prostíbulo que fue desactivado hace unos años.
“Lo que hacen es aprovechar la habilitación como bares para encubrir la actividad prostibularia”, explicó Schaerer.
La denuncia también alcanza al padre de la ex funcionaria bonaerense, José Antonio Zapico, de nacionalidad española; a quien sería su madre, Celsa Concheso Álvarez de Zapico; a una supuesta familiar, Mariana Zapico; y a los socios de Angelina Zapico en Loch Ness SRL: Segundo Gómez y Ares, Manuel Vásquez López y Andrés Cardozo.
A su vez, se denuncia a otras empresas vinculadas a los socios de Zapico: Malidel SRL, cuyo domicilio es el mismo que el del prostíbulo Sens y que es propiedad del padre de la concejal y de Nicolás Martiniano Pizarro; Llorio SRL, que es un hotel actualmente desactivado, pero que pertenecía a los padres; Lejole SRL, dueña del prostíbulo Periplo –también encubierto como bar–, de José Antonio Zapico, Gómez y Ares y Hernán Vázquez; y otras dos sociedades en las que Gómez Ares tiene acciones y que manejan bares: Seloch SRL y Piñeiras SRL.
A partir de esta información, Schaerer pidió que todas las personas mencionadas sean investigadas por asociación ilícita, e infracciones a la ley de migraciones, la ley de profilaxis y al artículo 145 bis del Código Penal, que reprime al que “ofreciere, captare, trasladare, recibiere o acogiere personas con fines de explotación, ya sea dentro del territorio nacional, como desde o hacia otros países, aunque mediare el consentimiento de la víctima”.
A su vez, por su calidad de funcionaria pública, Angelina Zapico fue denunciada por los delitos de fraude a la administración pública, abuso de autoridad y violación de los deberes de funcionario público, y negociaciones incompatibles con el ejercicio de la función pública.