El secretario de Seguridad de la Provincia, Paul Hofer, dice que están preparados para hacerse cargo de las causas de narcomenudeo y que el problema fundamental es trabajar con las adicciones.
- ¿Debe o no debe la Provincia hacerse cargo de la lucha contra el narcomenudeo?
- Hay una ley de adhesión que está frenada por una cuestión netamente judicial y que estamos esperando se resuelva. Ha habido una acción de inconstitucionalidad interpuesta por el Ministerio Público que ha frenado la adhesión de la provincia.
- En caso de que prospere este planteo, ¿esto es un problema de la Provincia o no?
- La provincia ha asumido el compromiso de pelear contra este flagelo y creo que es el camino correcto; tiene que hacerse fuerte y trabajar no solamente en la acción operativa contra el narcomenudeo, sino también en la demanda. El término correcto no es atacar la demanda sino abordar la problemática de la demanda. Siempre pongo el ejemplo de EEUU que, a través de la DEA, en 2013 invirtió 360 mil millones de dólares en la lucha contra el narcotráfico y no ha logrado reducir nada dentro del mercado interno de consumo, lo que da una muestra clara de que la acción operativa o el abordaje contra el narcomenudeo y el narcotráfico en general es una fórmula que tiende al fracaso. Además de eso hace falta un abordaje integral a través de una secretaría de adicciones que trabaje con el adicto, con su familia, en la escuela como se hace con la educación vial, inculcar el abordaje de las problemática de la droga en los menores. Es una realidad que existe en la sociedad con consecuencias no sólo en la salud sino en lo familiar y las condiciones de vida.
- Pero, ¿desde el año pasado han cambiado cosas?
- Nosotros lo que necesitamos a abordar una problemática que existe en los barrios, que es la venta de subsistencia, las PyMEs de droga. El delincuente hoy sabe perfectamente cuál es la mecánica para la venta para poder evadir la aplicación de la Justicia. Hoy a través de la Justicia Federal tenemos 60 allanamientos en el año; nos gustaría poder tener el doble o el triple de allanamientos, y estamos capacitados para eso. La problemática de los barrios implica que en la misma cuadra hay tres familias que están vinculadas, normalmente son mujeres, ancianos de la misma familia, que son los que terminan poniendo la cara. Son gente que en definitiva no puede rendir cuentas ante la justicia. Aquí el abordaje integral es que llegue la fuerza pública con la justicia, ponga en el banquillo de los acusados a esta gente pero la vez que rindan cuentas, que trabajen los operadores sociales que tenemos, si hay menores, ver su situación. Si hay un menor que crece en una familia que está dedicada a la venta de drogas y no hacemos nada, lo que estamos fomentando es la herencia delictiva. El juez de Menores tiene que ver la situación y, si hay que separarlos de la familia y ponerlos en una institución especializada, hay que hacerlo. Hoy la problemática es el narcomenudeo en Tucumán. No existen acá los grandes narcotraficantes.
- Pero si no cambiaran las cosas, ¿cuál sería la estrategia?
- Acá la ley tiene que prosperar. Tengo la esperanza de que podamos avanzar y de que la Provincia pueda abordar esta problemática. Cierto es que se requieren más fiscalías pero la situación en otras provincias ha sido buena. No olvidemos que la Justicia Federal tiene sólo dos juzgados y eso condiciona mucho la cantidad de allanamientos. Acá hay una decisión del gobierno de atacar el narcomenudeo. Somos los primeros que nos ponemos en la fila para atacar esta problemática, pero hace falta acompañamiento de otros sectores.
- Pero hay diferencia de criterio entre el Ejecutivo y el Ministerio público...
- Acá hay un solo criterio que es la necesidad y la realidad. No hay criterio jurídico que valga. Yo tengo que dar una respuesta a la gente y eso es una realidad. Si en una cuadra no muy lejos de aquí, tres personas venden y la Policía va y los detiene, y después entran y salen, entran y salen, la situación sigue igual. El mensaje que entonces estamos dando es que no pasa nada y, por más que haya una voluntad, la Justicia Federal hace lo que puede.
- ¿No será que la estrategia es insuficiente o equivocada?
- Yo reniego mucho de los encorsetamientos que tenemos en la sociedad. Nos encanta el marco legal y nos encerramos en los marcos legales, y nos olvidamos de que la política está para mejorar la vida de las personas. Cualquier estrategia de seguridad tiene que tener como elemento fundamental la persona. Si hoy no podemos ver la problemática principal que es el narcomenudeo en los barrios y nos encorsetamos en una cuestión netamente jurídica, bueno...