BUENOS AIRES.- La Argentina apeló hoy ante la Corte de Nueva York el fallo del juez Thomas Griesa que le impidió al Citibank ejecutar el pago del 31 de marzo y que derivó en la posterior suspensión de la entidad para operar en el mercado bursátil, informó hoy el Ministerio de Economía. 

A través de sus letrados, el país asumió la presentación de la apelación ante el tribunal superior y argumentó que los títulos nominados en dólares con legislación argentina no son deuda externa sino interna y no pueden estar alcanzados por el fallo de Griesa. En un comunicado, Economía señaló que Griesa, "insólitamente, extendió los efectos de las llamadas órdenes pari passu a bonos del canje regidos por ley argentina, pretendiendo, de ese modo, impedir nuevamente que los bonistas reestructurados cobren lo que Argentina paga y les corresponde en territorio argentino".

"La decisión del juez alcanza a la llamada 'deuda doméstica denominada en dólares', la que de ninguna manera puede ser alcanzada por la cláusula pari passu pues se trata de endeudamiento interno, regido por el derecho local", añadió el Palacio de Hacienda. Asimismo, precisó que "la misma Corte de Distrito había reconocido previamente que no había bases para extender la orden a estos bonos; sin embargo, el 12 de marzo revirtió sus propias decisiones, excediendo, nuevamente, su jurisdicción, tal como lo había hecho con los bonos del canje regidos por la ley inglesa".

"Las decisiones de la justicia estadounidense afectan gravemente al sistema financiero global y al derecho internacional. Su único objetivo es otorgar mayor poder de extorsión a los fondos buitres. Ya que el juez Griesa no logró poner a Argentina en default, pretende ahora seguir perjudicando a los bonistas", sostuvo Economía.

La cartera conducida por Axel Kicillof finalizó el comunicado puntualizando que "la Argentina agotará todas las instancias necesarias para defender sus derechos y el de los bonistas que de buena fe ingresaron a los Canjes de Deuda hasta que se arribe a una solución justa, equitativa, legal y sustentable para la República y para el 100 por ciento de sus acreedores". La decisión de continuar con los pasos judiciales se tomó luego que Citibank desistiera de hacerlo tras sellar un acuerdo con holdouts.

En ese pacto, Citibank se comprometió a no apelar la orden de Griesa que le impedía realizar el pago de los bonos en dólares con legislación argentina y a abandonar el negocio de custodia de bonos nacionales, a cambio de que se le otorgue una excepción para cumplir con los vencimientos del 31 de marzo y 30 de junio. Griesa no autorizó los pagos -tal como lo había hecho en otras tres oportunidades- pero dijo que "no lo impediría".

Como respuesta al acuerdo, el Gobierno nacional suspendió al banco como operador bursátil y también canceló la licencia de su presidente.