HOLANDA.- "¿Me podés abrir la puerta?", se tituló el premonitorio artículo publicado hace dos meses en una revista especializada en aeronáutica. El autor es Jan Cocheret, un piloto holandés que alertó en las páginas sobre el riesgo de que un copiloto de un avión esperara a que el piloto saliera de la cabina para cerrarla y no permitir su ingreso nuevamente. Eso es exactamente lo que sucedió en el vuelo de Germanwings en el que murieron 150 personas.
"Gracias a las puertas blindadas extraseguras, ya no es muy difícil que un piloto impida a su compañero que acceda a la cabina. Sólo tiene que esperar a que tenga que satisfacer sus necesidades naturales para no volver a abrirle la puerta", aseguró Cocheret, desnudando las falencias de los sistemas de seguridad que serán actualizados luego de que se conociera que Andreas Lubitz causó intencionalmente el choque. "Yo me pregunto continuamente quién está a mi lado. ¿Cómo puedo estar seguro de que puedo confiar en él?", se pregunta el autor de la nota. Una respuesta que todo el mundo busca.