La presión fiscal, medida con los ingresos fiscales sobre el Producto Bruto Interno (PBI), alcanzó en la Argentina el 31% durante 2013. De este modo, fue el segundo país con mayores ingresos por impuestos en América Latina y en el Caribe. Así lo señaló un informe reciente que elaboraron el Centro Interamericano de Administraciones Tributarias (CIAT), la Comisión Económica para América latina y el Caribe (Cepal), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). El primer lugar del ranking fue para Brasil, con una presión impositiva del 35%.
El reporte advierte, además, que la Argentina fue una de las naciones en las que más aumentó la presión impositiva, al hacer una comparación de la evolución de los indicadores entre 1990 y 2013, con un alza del 19%, al pasar del 12% al 31%. Esto se contrapone con la percepción de la presidenta Cristina Fernández, que había señalado que la presión fiscal estaba por debajo del promedio de los países desarrollados.
Según los autores del informe, sólo Bolivia registró un incremento de la presión fiscal del 20%, en el período analizado, hasta llegar al 27% actual.
Luego, en orden descendente, se ubicaron Ecuador (12%), Colombia y Paraguay (11%).
En el resto de países de la región la presión impositiva fue más controlada, con incrementos que oscilaron entre el 3% y el 8%, remarca el diagnóstico.
El estudio advirtió que en los países de la OCDE, la presión fiscal promedio, durante 2013, ascendió a 34,1%, con ingresos fiscales sobre el PBI comprendidos entre el 48% de Dinamarca y el 19% de México.
En comparación a estos datos -señaló el análisis- los ingresos fiscales en América latina y en el Caribe se mantuvieron estables en el período analizado, y continúan bajos como porcentaje de la renta nacional. El Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf) precisó que la presión tributaria en la Argentina fue más alta en 2013, con el 38%. El organismo, puntualizó que con la nueva medición del PBI, la presión fiscal pasó del 24% en 2004 al 34%, en 2013, lo cual evidenció una expansión del 43% entre ambos años.