Más vale poco que nada. Con esa frase se podría resumir el pensamiento de los vecinos y usuarios frecuentes del Parque Guillermina, que ayer asistieron a la inauguración de las obras de revalorización en el sector de acceso. Nuevas caminerías, más luz, juegos para chicos, una pista de salud y nuevos bancos le pusieron un toque de color y de vida al frente (avenida Mate de Luna) y a uno de los laterales (100 metros por la calle Rufino Cossio).

“Está muy lindo, ha quedado hermoso. Pero ahora falta dos cosas: primero, que lo cuiden y lo mantengan limpio; y segundo, que extiendan un poco la obra, principalmente la iluminación. Porque acá está bien iluminado, pero unas cuadras más adentro y es un peligro”, advirtió Daniel Leiva, quien vive en La Madrid y Rufino Cossio y visita todos los días ese espacio verde para hacer deportes.

Pero no todos son vecinos de la zona los que llegan a la antigua quinta de Alfredo Guzmán, uno de los paseos más convocantes de la ciudad. Noelia Porra es taxista, vive en El Manantial y luego de renegar porque el nuevo espacio de parqueo estaba reservado para autoridades, se bajó del auto y se quedó a tomar unos mates con una amiga. “Está hermoso, pero ahora lo importante es que enseñen a la gente a cuidar”, opinó. Lo mismo dijo su amiga Viviana Aden, de Yerba Buena: “debería haber placeros, como había antes, cuando nosotros éramos chicos. Es la única manera de cuidar”, dijo. Una cruda prueba comprobaba su idea: en la flamante pista de salud ya falta un juego, que fue sacado tras sufrir el vandalismo.

La riña con Patrimonio
Los grandes ausentes en el acto inaugural, presidido por el intendente Domingo Amaya y Germán Alfaro, secretario de Gobierno, fueron los miembros de la Comisión de Patrimonio. Mercedes Aguirre, directora de esa dependencia provincial, admitió ayer que se enteró por LA GACETA de la inauguración, y lamentó que la Municipalidad no haya cumplido con el procedimiento correspondiente para intervenir ese espacio que integra el listado de bienes protegidos: “es lamentable que el propio Estado, que debiera dar el ejemplo, no lo haga. Patrimonio pidió que se detuviera la obra, pero no cumplieron”, reclamó.

El conflicto con Patrimonio, suscitado al comienzo de las refacciones (en septiembre del año pasado), no fue tema de conversación durante el corte de cinta. Los vecinos e invitados oficiales recibieron con aplausos y caras de alegría el espacio renovado, aunque se lo haya hecho en una pequeña porción.