Estaba cansada, emocionada, agradecida, sorprendida, feliz y también enojada. Dolida.
Gladys “La Bomba Tucumana” estaba cansada porque había llegado a las 11 de la mañana al festival solidario que ella misma organizó. Tenía pensado tocar a las 21, pero quería estar en todo, escuchar las 68 bandas que pasaron por el escenario y controlar la masiva colecta de alimentos, ropa y colchones que traía el público. Su público.
Estaba emocionada, sorprendida y agradecida porque el desfile de camiones que se llenaban de la solidaridad tucumana era imparable. Salía un vehículo repleto cada hora y las donaciones seguían llegando. También los espectadores se sumaban, y alrededor de las 18 ya habían copado más de la mitad de la 24 de Septiembre al 300.
También estaba enojada porque se ha sentido sola. Conversando con LA GACETA, Gladys tiró la bomba: “en esta estamos solos. ¿Dónde está el país? Ni siquiera los noticieros de Buenos Aires han estado mostrando lo que nos pasa en Tucumán. Pero claro, cuando alguna provincia nos necesita, ahí estamos los tucumanos, firmes. No importa, le vamos a hacer frente a esto solitos y chiquitos como somos”. Es lo mismo que dijo arriba del escenario en una de sus apariciones antes del show. Tucumán, su Tucumán, la ovacionó.
El impulso de ayudar
El festival solidario “Juntos por Tucumán” fue idea de Sergio Gómez, hermano y eterno locutor de la reina tropical. “Estaba viendo en la tele lo que estaba pasando, la llamé a Gladys y le dije que teníamos que hacer algo. Esto fue el martes, o sea que tuvimos cinco días para conseguir escenario, sonido, las bandas y los camiones para llevar las donaciones”, contó. Confesó que es la primera vez que organiza algo de estas dimensiones. La propia Gladys puso su teléfono a disposición para que la llamaran todos los que estuvieran dispuestos a colaborar. No dejó de sonar ni un minuto desde el martes hasta ayer y el único organismo oficial que también se sumó fue la Municipalidad de la capital, que aportó los camiones y la logística.
“Me llamaron en el acto, pero yo puse una condición: ni una foto, ni un cartel ni nada que haga referencia política ni a las elecciones. Acá somos nosotros”, afirmó.
La recolección y distribución de las donaciones estuvo en manos de Cáritas Arquidiocesana, que desde hace dos semanas no tiene respiro frente al aluvión solidario de los comprovincianos. Rosa Ghidara, de la comisión directiva, contó que desde el lunes pasado parten de la sede de San Lorenzo 441 tres camiones diarios con donaciones hacia las distintas parroquias de la provincia, además de los autos y camionetas particulares. “Creo que Tucumán siempre es solidaria, pero ahora es más solidaria porque la necesidad es más grande también”, reflexionó.