La situación en la zona sureste de la provincia es complicada. Hasta que las nubes oscuras no se aparten del cielo, en Monteagudo y en La Madrid temen que el agua pueda seguir subiendo. Durante la noche y la mañana de hoy, grandes extensiones de los departamentos de Simoca y Graneros quedaron anegadas. Cientos de afectados fueron trasladados a Atahona. Pero temen que si el río Gastona continúa incrementando su caudal, esta localidad también quede bajo el agua.
El paisaje en esas zonas es desolador. Cientos de personas se han autoevacuado hacia las rutas y allí pasaron la noche. La inundación no les dio tiempo a rescatar ninguna pertenencia y se dirigieron hacia los caminos para proteger sus vidas.
Los rescatistas también están tratando de llegar a localidades que en este momento se encuentran aisladas, como Palomino y Chicligasta. Como el agua cortó todos los caminos, se desconoce la situación de sus habitantes.
Hasta el momento no se conocen cifras oficiales sobre las personas que fueron evacuadas o que dejaron sus hogares de manera voluntaria.