SANTIAGO, Chile.- Apenas hizo unos pasos sobre el campo de juego miró al banco de suplentes con gestos de dolor. El volante chileno Marco Medel sufrió la lesión más rápida de la que se tenga registro. Ingresó a los 9 minutos del segundo tiempo, en reemplazo de un compañero, pero apenas 10 segundos después sufrió un desgarro, se desplomó sobre el césped y tuvo que salir en camilla. Medel no alcanzó siquiera a participar de una jugada. De hecho, ingresó, se lesionó y salió sin que la pelota estuviera en movimiento. Increíble.