BUENOS AIRES.- El técnico informático Diego Lagomarsino advirtió que sus huellas “deberían estar” en el arma que le entregó a Alberto Nisman, de donde salió el disparo que acabó con la vida del fiscal, y aseguró que él “no” limpió la pistola calibre 22. Lagomarsino, además, calificó al fallecido funcionario judicial como un “tipo con cojones” y fue más allá en su ponderación: “Era el toro de Wall Street de Nueva York vivo”, ilustró.

“Cuando terminé la tesis puse a Nisman entre mis agradecimientos, porque me enseñó que ‘ahora’ es ‘ya’”, sostuvo en un reportaje publicado por el diario El País.

El experto informático era colaborador de Nisman y es el único imputado en la causa ya que le dio el arma. “No lo sé. Deberían estar mis huellas. Desconozco los motivos técnicos de que eso ocurriera”, respondió Lagomarsino cuando se le preguntó a qué atribuía que en la pistola no hubieran aparecido rastros suyos. (DyN)