La sede del Instituto Cervantes de Madrid tiene desde hoy un pedacito de Aracataca, la ciudad que vio nacer al escritor colombiano Gabriel García Márquez, fallecido en abril del año pasado. La ministra colombiana de Cultura, Mariana Garcés, fue la encargada de depositar en la Caja de las Letras de la institución un cofre con tierra de la casa natal del autor de “Cien años de soledad”.
“Millones de lectores sucumbieron fascinados ante unas historias que habían tenido en Aracataca y en la abuela Tranquilina la génesis de su creación”, expresó la directora cultural del Cervantes, Beatriz Hernanz. Es que el Nobel de Literatura, uno de los máximos exponentes del realismo mágico, se crió en esa ciudad del norte de Colombia junto a sus abuelos, de quienes aprendió la “alborotada” historia de su país y el arte de fabular, añadió.