La Cámara Federal de Bahía Blanca solicitó al Juzgado Federal de Santa Rosa “celeridad” en la causa en la cual se investiga a cinco personas acusadas de integrar una red de trata de personas con fines de explotación sexual.

La banda habría funcionado dentro de un boliche denominado “Chicho Show”, ubicado en la localidad de Macachín, y habría contado con la complicidad del intendente de esa ciudad, Jorge Cabak, y un comisario. Además, la Cámara modificó el procesamiento de Oscar Moya y Maximiliano Daniel De Luca. Ambos habían sido imputados como partícipes necesarios y ahora fueron procesados en calidad de coautor y partícipe primario respectivamente.

En el fallo se consideró que Moya “no sólo era una de las personas que se ocupaba del traslado de las personas de sexo femenino sino que también participaba activamente en la atención del Cabaret Chicho Show”.

El resto de los imputados son: Daniel De Luca, dueño del boliche que funcionaba como una “casa de tolerancia”, Esmundo Blas, su socio y con quien ordenaban la recepción y acogimiento de las víctimas y Leandro Ariel Otero, quien habría sido el regenteador del lugar.

La causa se inició en febrero de 2011, cuando una investigadora relató que había tenido una entrevista con una persona que le informó sobre una mujer oriunda de República Dominicana que trabajaba en un local nocturno en Buenos Aires, y que no habría estado conforme con su contexto laboral. El prostíbulo estaría, a su vez, conectado con la whiskería Chicho Show en La Pampa donde se desbarató la banda. (Especial)