BUENOS AIRES.- Manchas de sangre, detectadas con luminol, y una serie de pelos que no se sabe a quién pertenecen fueron encontrados ayer en el departamento de Puerto Madero donde fue encontrado muerto el fiscal Alberto Nisman el pasado 18 de enero, en el marco de una nueva inspección pedida por la querella.
La ex mujer de Nisman, la jueza Sandra Arroyo Salgado, había solicitado llevar adelante la medida y, al término del procedimiento, sus peritos aseguraron que se habían encontrado “nuevas evidencias” que hasta ahora “no habían sido tenidas en cuenta”.
Las fuentes señalaron que se encontraron manchas de sangre a través del luminol que hasta ahora no había sido usado -un líquido que puede marcar con manchas fluorescentes donde hubo sangre-. Trascendió además que se levantaron pelos en cercanías del sector del baño, donde fue hallado el cadáver, con un balazo en la cabeza.
Habrá que corroborar si esos pelos pertenecen a la víctima o a otra persona que habría que identificar, máxime teniendo en cuenta que muchas personas circularon por el lugar en la noche del 18 de enero y la madrugada del 19 de enero, señalaron las fuentes consultadas.
El procedimiento
La fiscal Viviana Fein, a cargo de la instrucción, estuvo presente en el procedimiento, al igual que Arroyo Salgado, la madre del fiscal Sara Garfunkel, expertos de la Policía Científica y los especialistas de la querella, el forense Osvaldo Raffo y el ex jefe policial Daniel Salcedo. El jueves, Arroyo Salgado había cuestionado en una audiencia en el Congreso a la fiscal Fein y a la jueza que interviene en la causa, Fabiana Palmaghini.
Minutos después de las 11 de la mañana, todas las partes se hicieron presentes en el departamento 4 del piso 13 de la torre Boulevard, del complejo Le Parc de Puerto Madero, para participar del procedimiento.
La medida había sido requerida por la querella compuesta por la madre Nisman y Arroyo Salgado, en representación de las hijas que tuvo con el fiscal, Iara y Kala, ambas menores de edad.
Alrededor de las 17 se retiraron todos los que habían participado del procedimiento, aunque los únicos que accedieron a hablar con la prensa fueron los expertos contratados por la querella.
“Hay elementos nuevos, evidencias físicas que se han levantado y que serán evaluadas. Encontramos evidencias que no habían sido tenidas en cuenta”, indicó Salcedo ante la prensa. El criminalista indicó que en el lugar se hizo la prueba de luminol, peritaje con el cual se puede detectar manchas de sangre no visibles para el ojo humano, que hasta ahora -pese a que pasó casi un mes de los hechos- nunca se había usado.
“Trabajamos con reactivos, con luces forenses y luminol. Es la primera vez que se hizo en este lugar”, confirmó Salcedo.
Además se hizo además “un reconocimiento del terreno, del lugar del hecho, y tomaron vistas fotográficas y filmaciones”, apuntó.
A su turno, el reconocido médico forense Osvaldo Raffo, jefe del equipo de peritos de parte, indicó que en el departamento además se hizo “una inspección de ángulos y se filmó todo”.
“Hoy no se puede sacar ninguna conclusión. Trabajamos con luces especiales, se fotografió y se filmó todo. Debemos analizar las filmaciones”, precisó. (DyN)