La destitución de Juan Rosario “Chicho” Mazzone, que hasta ayer era el intendente de la localidad salteña El Bordo, se convirtió en el primer paso del Gobierno de la vecina provincia para superar la crisis institucional en la que quedó sumido este municipio, luego de una polémica fiesta que se realizó en la casa del jefe municipal.

El martes la Cámara de Diputados de Salta ya se había pronunciado a favor de la intervención del Ejecutivo municipal y del Concejo Deliberante de El Bordo. El Senado salteño coincidió ayer con la media sanción que había obtenido el proyecto en la Cámara Baja y, en una sesión extraordinaria, Mazzone fue apartado de la intendencia con los votos de los bloques oficialistas y opositores, tal como había anticipado LA GACETA SALTA.

Por la oposición, el Partido Obrero (PO) y el radicalismo se mostraron de acuerdo con la intervención de la intendencia de El Bordo, pero no del Concejo Deliberante. El senador del bloque radical por Cachi, Américo Liendro, dijo que intervenir a Mazzone “es hacer justicia”, pero intervenir al cuerpo legislativo “es un castigo injusto”.

Por su parte, la fuerza de izquierda propuso que Ana Fernández, de la Comisión de Familiares de Víctimas contra la Impunidad, sea la interventora de la localidad hasta que se convoque a elecciones, pero sus pares no aceptaron la propuesta y la decisión quedó en manos del gobernador Juan Manuel Urtubey quien, por medio de un decreto, definió al encargado de llevar adelante el proceso de regulación institucional en El Bordo.

La senadora del PO, Gabriela Cerrano, insistió en que haya “una intervención libre e independiente, que no sea designada por Urtubey”, pero su moción fue rechazada por sus pares. De esta manera, Matías Assennato fue designado por el gobernador como el interventor de la municipalidad de El Bordo.

Assennato dialogó con este diario y llevó tranquilidad a los empleados del municipio. En este sentido dijo que “mantendrán sus fuentes laborales” y afirmó que “serán parte fundamental y necesaria para normalizar el municipio”. También adelantó que “la intervención no interferirá en los procesos judiciales en contra de Mazzone”, en referencia a la investigación que se realiza por el presunto delito de corrupción de menores.

El escándalo en El Bordo estalló el mes pasado luego de que se difundiera una foto en la que se veía a Mazzone abrazado con una menor que estaba sólo con ropa interior.

Al conocerse esta imagen el ahora ex intendente se justificó diciendo que ese día hacía calor y que por eso se había sacado la camisa. Pero el miércoles se filtró en las redes sociales la fotografía completa la que se ve al jefe municipal destituido con una caja de vino en la mano izquierda y, a diferencia de lo que sostuvo en su descargo público, vestido apenas con un slip.

La causa judicial

Por su parte, René Gómez, defensor de Mazzone en la causa en la que está acusado por corrupción de menores, habló sobre la fotografía que apareció el miércoles. “No es prueba necesaria para constatar un delito. Las fotos nuevas que aparecieron de Mazzone sólo muestran el cuerpo entero”, relató el letrado.

Gómez aseguró que incluso si hubiera estado desnudo con la menor de edad, se trataría solamente de un caso de exhibiciones obscenas, y no de corrupción de menores. Además, aseguró que aún no fue notificado del requerimiento de elevación a juicio oral que hicieron dos fiscales.