El sector lechero argentino no logra salir, definitivamente, de la crisis permanente que lo agobia desde hace varios años.

En el marco de un ciclo de estancamiento que viene sufriendo el sector tambero desde 1999, y que se ha acentuado en los últimos años, la producción de leche de la Argentina caería nuevamente en este 2015, lo que representa una contracción por tercer año consecutivo, advirtió Confederaciones Rurales Argentinas (CRA).

Esta contracción en la producción de 2015 se debería a una caída en el precio real que recibe el tambero, por la combinación de precios al productor artificialmente bajos y una alta inflación.

Además de la elevada presión impositiva, se le suman condiciones climáticas no óptimas y el deterioro en la relación entre insumos y precio de la leche a lo largo del año.

No pueden competir

Por otro lado, el precio en dólares que recibe el tambero argentino está muy por debajo de lo que reciben competidores como Brasil y Uruguay, lo que genera que las inversiones lácteas se vayan a aquellos países.

De no existir una recomposición del precio al productor, se acelerará la expulsión de tambos de la actividad productiva, advirtieron.

El estancamiento de la producción de leche en la Argentina se hace más visible si se miran los últimos años, en los que los países competidores como Brasil, Uruguay y Nueva Zelanda han aumentado su producción, mientras que la Argentina muestra una caída del 4%, entre 2011 y 2014.

Retroceso

Considerando la cotización del dólar libre, el tambero argentino recibe casi un 50% menos que un tambero uruguayo o brasileño. Esto es consecuencia de los bajos precios, medidos en pesos, al productor en la Argentina y al cepo cambiario impuesto desde 2011, explicó CRA.