WASHINGTON, Estados Unidos.- La directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, se mostró ayer pesimista sobre las posibilidades de que la economía mundial se recupere en el corto plazo. La funcionaria formuló su pronóstico, pese a que los precios globales del petróleo siguen en caída. Las proyecciones de Lagarde coincidieron con un nuevo descenso de los valores globales del crudo. El barril de WTI, que se produce en Estados Unidos, se desplomó 4,6% y cerró a U$S 46,25. El crudo Brent, referencial de los mercados europeos, mermó el 2%, a U$S 47,67.
La funcionaria del órgano de crédito consideró que aún hay muchos países que sufren las consecuencias de la crisis financiera internacional, y que registran altas tasas de desempleo y de endeudamiento. Además, lamentó el débil crecimiento de la eurozona, de Japón, al tiempo que proyectó una desaceleración, durante 2015, de economías pujantes como la de China. “El crecimiento global sigue siendo muy bajo y unilateral”, argumentó la titular del FMI, durante un discurso en Washington.
En relación a la crisis que atraviesa el precio global del crudo, Lagarde consideró que el desplome impulsará el consumo en gran parte del mundo. Sin embargo, aclaró que Estados Unidos, probablemente, sea la única gran economía que este año escapará a la tendencia de debilidad de inversión y de consumo. “¿Deberían los bajos precios del petróleo ayudarnos a ser más optimistas sobre las perspectivas de la economía mundial?”, se preguntó. “La respuesta más probable es que no”, agregó.
Además, la funcionaria advirtió sobre los riesgos de las diferentes políticas monetarias aplicadas en las principales economías. En este sentido, indicó que la posible suba de las tasas de interés bancarias en Estados Unidos, por primera vez desde 2006, repercutiría de manera negativa en los países emergentes “Un dólar fuerte y un precio bajo del petróleo podría perjudicar a las naciones más débiles”, subrayó la francesa.
Se profundiza la caída
En su reporte mensual, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) pronosticó ayer que la demanda de crudo producido por las naciones que integran el bloque caería a 28,78 millones de barriles por día (bpd) durante 2015, una baja de 140.000 bpd frente a su expectativa previa.
El Bank of America Merrill Lynch recortó sus estimaciones de los precios globales del petróleo, al asegurar que el crudo Brent podría desplomarse hasta los U$S 31 por barril hacia finales del primer trimestre de este año. (DPA-Reuters)