Las autoridades de Agra, en el norte de la India, han prohibido la quema de estiércol de vaca empleado como combustible para reducir la contaminación que amarillea el mármol blanco del Taj Mahal, una de las siete maravillas del mundo. “Un reciente estudio publicado en un periódico americano asegura que, debido a las partículas de carbono, el mármol blanco se está volviendo amarillo”, dijo un responsable del monumento, Pradeep Bhatnagar.

Este responsable añadió que teniendo en cuenta ese estudio se ha prohibido el uso de tortas de excrementos de vaca -desecados- empleadas para cocinar en esta ciudad del estado de Uttar Pradesh, cuya área urbana tiene cerca de dos millones de habitantes.

La quema de este combustible tradicional será sancionada con una multa y las autoridades de la ciudad promoverán el empleo de gas, tanto en el uso doméstico como para vehículos. “Estas partículas contaminantes no se lavan con las lluvias y es difícil levantar andamios alrededor del Taj Mahal para tratar los mármoles químicamente, por lo que no había otra opción que tomar esta iniciativa”, aseguró Bhatnagar.

El Taj Mahal, uno de los monumentos más visitados del mundo, fue objeto en 1994, 2001 y 2008 de tratamientos con un barro cuya composición se basa en un cosmético tradicional, para evitar el cambio de color y la pérdida de brillo del mármol.