CHILECITO.- No hay tres sin dos para Orlando Terranova. Aún ofuscado por su error del lunes que lo llevó a un vuelco con su Mini (“mientras el auto se iba dando vuelta ya me estaba puteando”, dijo al respecto), el mendocino ganó la tercera etapa del Rally Dakar, que unió ayer San Juan con esta ciudad riojana. Y si bien con su victoria se acercó al líder de la general, el qatarí Nasser Al Attiyah (Mini), se mantiene lejos en cuanto a tiempo: 18’05” separan a uno de otro. El consuelo para “Orly” fue haber recuperado terreno en la clasificación, en la que pasó del 10° puesto al 3°. “Salimos a intentar mantener nuestra velocidad sin cometer errores. Fuimos avanzando y viendo que pasábamos a otros pilotos. Pero tuvimos problemas con la temperatura del agua, al principio y al final nos molestó”, señaló.
Los competidores completaron en esta oportunidad una etapa más breve, aunque sobre un terreno con piedras y dificultades, luego de la extenuante jornada del lunes, que tuvo el especial más largo del rally bajo un calor extremo. Según declaraciones de algunos pilotos y navegantes, llegaron a sentirse más de 60° dentro del habitáculos de los coches. Y aunque ayer las temperaturas no fueron menos intensas, la situación fue mitigada por la reducción de las complicaciones en el terreno y por la menor distancia recorrida.
Terranova, que había conquistado la primera etapa, recorrió el especial de 284 kilómetros en 2hs.57’28”, escoltado por el sudafricano Giniel De Villiers (Toyota) a 1’54” y el sorprendente debutante saudí Yazeed Alrajhi (Toyota), a 2’52”. En 4° lugar llegó el español Carlos Sainz (Peugeot), a 4’06”, mientras que Al Attiyah quedó 5° a 4’18”. El español “Nani” Roma (Mini) se ubicó en el 6° puesto, a 5’58”, pero sigue muy lejos en la clasificación.
La recuperación de los Peugeot se ratificó también con la mejora que mostraron los franceses Stéphane Peterhansel, que llegó en séptimo lugar a 9’26” del líder, y Cyril Després, que cada día luce más cómodo en su debut en autos y quedó 14° a 21’12”.
La amplia ventaja que consiguió Al Attiyah el lunes en la segunda etapa del Dakar le permitió mantenerse como líder de la clasificación general, escoltado por De Villiers (pinchó un neumático con una piedra filosa), Terranova y Sainz. “Aunque el especial tres fue más fácil que el dos, al haber abierto el camino nos llevó a tener cuidado con la navegación. Sin dibujos de las motos para guiarnos, es más complicado, pero Matthieu Baumel, mi navegante, hizo un trabajo estupendo. Decidimos no arriesgar, pero la idea era terminar en el Top 5”, dijo el qatarí. (Especial)