YAKARTA.- Barcos de Indonesia detectaron en el fondo del mar cuatro grandes objetos que pertenecerían al avión de la aerolínea AirAsia, que se estrelló frente a la isla de Borneo con 162 personas a bordo, aseguró el responsable de la búsqueda, Bambang Sulistyo. Dos de los objetos fueron localizados la madrugada del sábado y los otros dos horas después. A la zona serán enviados equipos de buzos. Según los expertos podría tratarse de partes del fuselaje y de las alas del avión. “Conseguimos detectar dos objetos grandes”, explicó Bambang respecto a los dos primeros objetos localizados. “Un objeto mide 9,4 por 4,8 por 0,4 metros y (lo que se sabe es que) el otro mide 7,2 por 0,5 metros, y ambos están cerca uno del otro”, indicó.
El vuelo QZ8501 con 162 personas a bordo cayó al mar cuando viajaba de Surabaya, en Indonesia, a Singapur el pasado domingo.
De las 162 personas a bordo, 155 eran indonesios y el resto tres surcoreanos, un singapurense, un malasio, un francés y un británico. Por el momento se recuperaron 30 cuerpos.
“Nuestro principal objetivo es encontrar a nuestros hermanos y hermanas que todavía podrían estar dentro de los objetos” localizados, explicó Bambang.
El tiempo corre en contra de las tareas de rescate, pues los cuerpos pueden descomponerse rápidamente en las cálidas aguas de la zona, apuntó un miembro de los equipos de rescate del Ejército indonesio. “Una vez que los cuerpos se descompongan será muy difícil identificarlos”, apuntó el director de las operaciones de búsqueda, Suyadi Supriyadi.
Dos aviones rusos, uno de ellos anfibio, llegaron a la zona de búsqueda, junto con 50 buzos y un submarino no tripulado. Bambang explicó que el avión anfibio se encargaría de buscar objetos que se encuentren flotando en el agua, sobre todo cuerpos que se hayan alejado de la zona de búsqueda. En las tareas de rescate participan ya 19 aviones y hasta 30 barcos de siete naciones, entre ellas Malasia, Singapur y Estados Unidos. La agencia de búsqueda y rescate de Indonesia dijo que la zona de búsqueda había sido ampliada, debido a que el vuelo podría haberse desviado más de 200 millas náuticas, y agregó que helicópteros se concentrarían en la revisión de la costa del sur de Borneo
La otra prioridad es encontrar las cajas negras del Airbus 320/200, con las que se espera poder averiguar las circunstancias en las que se produjo el accidente. En cuanto a los motivos de la tragedia, científicos del gobierno indonesio consideran que el motor del avión podría haber resultado dañado al formarse hielo cuando ingresó en la tormenta que en esos momentos se abatía en la región. El avión volaba a unos 32.000 pies (9.753 metros) de altura y el piloto pidió subir a 38.000 pies para evitar el mal clima poco antes de perder el contacto. Cuando los controladores de vuelo lo autorizaron a subir a 34.000 pies pocos minutos después, no recibieron respuesta.
“El fenómeno meteorológico más probable fue la formación de hielo, que podría haber dañado el motor del avión”, agrega la institución, que advierte que no se trata de la conclusión final sobre las causas del accidente.
Las autoridades indonesias prohibieron a AirAsia volar la ruta de Surabaya a Singapur, después de que se descubriese que la aerolínea no tenía permiso para cubrir el trayecto ese día de la semana, precisamente en el que se produjo el accidente. AirAsia sólo tenía permiso para volar esa ruta los lunes, martes, jueves y sábados. La prohibición entró en vigor el viernes 2 de enero.
“Lo que se violó es el permiso del Ministerio de Transportes, que es emitido cada seis meses”, explicó el director de la Aviación Civil, Djoko Murjatmodjo. “Vuelan cuatro veces a la semana, pero los horarios son diferentes”, apuntó, indicando que se ha lanzado una investigación para estudiar las discrepancias.
El director ejecutivo de AirAsia, Sunu Widyatmoko, aseguró que la compañía está colaborando con el gobierno para estudiar esta práctica. (DPA-Reuters)