"Para mí, fue el mejor jugador de San Martín de todos los tiempos", señala con convicción Roberto Albornoz, historiador del club "santo", que acaba de perder a una de sus máximas glorias futbolísticas. Esta mañana falleció a los 76 años Federico Armando Akemeier, que padecía una enfermedad terminal, era casado y padre de dos hijos.
Nacido en General Vespucio (Salta), formó una dupla inolvidable con su coterráneo Roberto Karanicolas allá por la década del 60, vistiendo la camiseta "albirroja" y ambos integraron el seleccionado tucumano que fue campeón argentino en Bahia Blanca (1963) derrotando en la final a Paraná 3-1.
Fue un goleador de aquellos, dueño de un formidable remate que combinaba potencia y dirección. Estuvo en la mira de varios clubs porteños, pero finalmente fue declarado instransferible por el club de La Ciudadela. Con el "santo", fue campeón del Competencia (1964), campeón de Honor (1965), Anual (1966 y 1967), y tuvo como compañeros de equipos a otras destacadas figuras como Valperga, Ricardo Íñigo, Segundo Corvalán, Luna, Del Prado, Luis Urueña, Meija, entre otros.
Sus restos son velados en avenida Colón 750 y serán inhumados a las 18 en el Cementerio del Recuerdo (Los Nogales).