BUENOS AIRES.- La presidenta Cristina Fernández utilizó hoy su cuenta de Twitter para destacar la rebaja de las naftas y repasar algunas anécdotas de reuniones que mantuvo ayer en la Casa de Gobierno, que definió como un "día mágico".
En una serie de tweets, la jefa del Estado mencionó el breve encuentro que mantuvo con los periodistas acreditados en la Casa de Gobierno que, dijo, "estaban re simpáticos. Se ve que el espíritu navideño nos llega a todos". Por otro lado, Fernández de Kirchner resaltó la baja en el precio de las naftas: "lo increíble? Y qué te parece?: Ayer decidimos bajar 5 por ciento al precio de todos los combustibles...".
En este marco, preguntó si antes "cuando bajaba el precio del petróleo bajaba el precio del combustible? Nunca. Never in the life!" (Nunca en la vida). Luego recordó que recibió "en audiencia a miembros de la Conferencia Episcopal Argentina, con su presidente: Monseñor José María Arancedo", que le transmitieron su mensaje navideño.
Cristina Fernández relató que "Monseñor Amalfa" (en realidad Carlos Malfa, obispo de Chascomús) le regaló un pesebre hecho por Monjas Benedictinas, y entonces reveló que cuando era chica antes de hacer algo que no le gustaba decía "Antes me hago Monja Benedictina". "Ni me acuerdo de dónde lo había sacado. Qué cosa no? Soy Presidenta y ellas me hacen un regalo", reflexionó.
A propósito de la reunión con miembros de la Iglesia, reconoció que junto al árbol de Navidad que está en la puerta de la Casa de Gobierno, falta un pesebre, según le advirtió el cardenal Mario Poli. "Tenía razón. Ya mandé a armar uno bien grande y lindo a Aníbal Fernández", dijo en tono de broma en referencia al flamante secretario general de la Presidencia.
“Después recibí a Jorge Castro Rubel, nieto recuperado 116, a su esposa Valeria y a sus dos hijitos Mateo y Zoe que no pararon de correr por todo el despacho durante la reunión. También vino Valeria, nieta 110. Los 2 me querían conocer y yo a ellos”, continuó. “Jorge, que nació en la Ex ESMA en 1977, me trajo un regalo que me conmovió: un portarretrato con una foto color sepia. La había tomado él mismo, el 24 de marzo de 2004, en el acto de recuperación en el que habló Néstor, Juan Cabandié, dos chicos de H.I.J.O.S. y Solita Silveyra recitó un poema. En la foto estamos todos en el escenario”, agregó.
“Mágico fue recibir a Iair Tawil, primer ahijado presidencial de nuestra historia que profesa la fe judía. Iair, 21 años, dulce total. Su familia, una maravilla”, siguió. Y explicó que “Me trajeron de regalo un candelabro de Israel. Me pidieron que encendiera las velas y a Iair, que hiciera el rezo. Un momento muy especial. Después me dijeron que tenía que apagarlas y pedir un deseo. Lo hice. Ni sueñes que te voy a contar que pedí. Me hicieron sentir muy bien”.
Al finalizar su extensa serie de tweets, la Presidenta se animó a vaticinar cómo iban a titular los diarios:
(DYN- Télam)