BUENOS AIRES.- Por necesidad, casualidad, obligación o como quiera llamársele, River le dio ayer una importante mano a Boca. Derrotó a Estudiantes de La Plata en los cuartos de final de la Copa Sudamericana y le permitió a su “archirrival” clasificarse nada menos que a la Copa Libertadores 2015.
Para clasificarse y volver a la competencia internacional por excelencia en nuestro continente, los dirigidos por Rodolfo Arruabarrena necesitan ser el equipo que más lejos llegara en la Sudamericana, y lo logró. ¿Cómo? Si bien aún permanece River en la competencia, por ser el campeón del Torneo Final 2014 ya estaba con el boleto en el bolsillo y liberó un cupo.
Por el momento Boca irá al repechaje, pero los de Núñez le pueden dar un empujoncito más de aliento: si consiguen el bicampeonato, le permitirá al Xeneize meterse de lleno en la fase de grupos. Quién te ha visto y quién te ve.