BRASILIA.- Las declaraciones de un ex director de la compañía estatal brasileña Petrobras, denunciando que decenas de políticos oficialistas integraban una red de corrupción, cayeron como una nueva bomba en la campaña de reelección de la presidenta, Dilma Rousseff (foto). Sin embargo, ella afirmó que tomará “medidas apropiadas” cuando tenga información oficial sobre el testimonio de Paulo Roberto Costa. “La propia revista (Veja) que reveló el caso dice que el proceso está en criptografía, está en un cofre e irá al Tribunal Federal”, señaló Rousseff antes de un acto de campaña en San Pablo. (DPA)
Una denuncia sacude a Rousseff