MONZA.- Aún sin la certeza de que la lucha interna que sostienen acabará realmente según lo sugirió el equipo Mercedes, el alemán Nico Rosberg y el británico Lewis Hamilton mantienen en alto otra lucha, la de la pista. Estos enemigos íntimos no están dejando casi nada al resto y otra muestra se dio ayer: hicieron el 1-2 en los primeros ensayos camino al GP de Italia, en el mítico Monza.

Cada uno de ellos encabezó una sesión. Y sentó así posición sobre lo por venir. Se piensa que hoy en la clasificación (comienza a las 9 y la televisará Fox Sports) irán al límite, como es habitual, buscando la pole para la final N°13.

La victoria debería decidirse de nuevo entre ambos, a no ser que vuelvan a tocarse entre ellos como sucedió hace dos semanas en el Gran Premio de Bélgica. Con objeto de evitarlo, el equipo Mercedes les advirtió de que puede despedirlos a final de temporada si no son capaces de mantener bajo control su rivalidad. “Tendríamos que tomar decisiones y aceptar las consecuencias de tener una pareja diferente de pilotos”, dijo el jefe deportivo de Mercedes, Toto Wolff. “Tendremos que ser capaces de lograr que los dos sigan el espíritu Mercedes”, añadió. (Especial-DPA)