El ex jefe de Policía, Hugo Sánchez, declaró ayer en la Fiscalía de Instrucción de la IV° Nominación acusado de haber perpetrado maniobras de encubrimiento en el crimen de Paulina Lebbos.
La indagatoria comenzó a las 8.30 y, según explicó el defensor de Sánchez, el abogado Enrique Andrada Barone, la interpelación se extendió unas ocho horas. En ese tiempo el ex funcionario alperovichista presentó un descargo ante la imputación que pesa en su contra y respondió a todas las preguntas que le formuló el fiscal Diego López Ávila que se hizo cargo de la causa a mediados del año pasado, luego de la criticada instrucción que había realizado el ahora jubilado fiscal de Instrucción de la II° Nominación Carlos Albaca. A primera hora de la mañana, el defensor del comisario retirado había presentado una exención de prisión para evitar que su cliente pueda quedar preso por el delito que se le imputa (encubrimiento agravado). Esta estrategia de defensa, que según Andrada Barone suele ser una presentación de rutina cuando peligra la libertad del acusado, ya había sido utilizada la semana pasada por el abogado Dante Sarmiento, que defiende al ex secretario de Seguridad Eduardo Di Lella.
En este sentido, también se informó que los dos ex funcionarios continúan como imputados en la causa y que, en caso de que el fiscal lo requiera, deberán volver a comparecer ante la Justicia. El ilícito por el que ambos están siendo acusados se agrava porque cumplían una función pública en el momento en que, de acuerdo con la hipótesis del fiscal López Ávila, cometieron el delito.
En cuanto a la indagatoria, Andrada Barone dijo que su cliente probó que no tiene vinculación alguna con la imputación que pesa en su contra y que el proceso está en una etapa primigenia. “Ahora tenemos que elaborar las pruebas para comprobar el descargo de mi defendido, aunque su declaración fue exhaustiva y no se guardó nada. Es prematuro hablar acerca de una solicitud de sobreseimiento, pero más adelante voy a pedir que desvinculen a Sánchez de esta causa”, puntualizó el abogado.
En este marco, el defensor explicó que es todavía muy lejana la posibilidad de que se requiera la elevación a juicio de la causa y que, aunque el fiscal la solicite, las defensas pueden interponer recursos para evitar que los ex funcionarios deban sentarse ante un tribunal para defenderse de los hechos que les imputan.
Fuentes judiciales comentaron que Sánchez está involucrado por las declaraciones de algunos policías que estuvieron en el lugar en el que fue hallado el cuerpo de Paulina el 11 de marzo de 2006 (a la vera de la ruta 341, a la altura de la localidad de Tapia). Concretamente, una de las personas que lo mencionó es el ex comisario Rubén Brito (también imputado por encubrimiento), quien deslizó que Di Lella y Sánchez dieron órdenes para que se fraguaran las actas con las condiciones del hallazgo del cadáver.
Alberto Lebbos, padre de Paulina, también estuvo en tribunales durante la declaración de Sánchez. “Estas exenciones de prisión son derechos que tienen estos personajes siniestros, pero es indudable que lo están haciendo porque saben que van a quedar presos. Sánchez es un mentiroso que forma parte del núcleo duro de esta banda de encubridores que encabeza (José) Alperovich. Si no, ¿cómo se explica que el gobernador los haya mantenido en sus cargos durante siete años?”, cuestionó.