BAGDAD.- Aviones de combate estadounidenses reanudaron sus ataques contra posiciones del grupo Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS) en el norte de Irak, pese a las amenazas vertidas por los yihadistas en el video que muestra la decapitación del periodista James Foley. Al menos 35 extremistas murieron en ataques al sur de la presa de Mosul, informó la agencia de noticias Al Sumaria News. Los jets de combate estadounidenses destruyeron además siete vehículos de los yihadistas.
En tanto Irán, país cuyos regímenes mantienen desde hace décadas una enemistada distancia con Estados Unidos, expresó su disposición a colaborar en los combates contra el ISIS. No obstante, a cambio exigiría la revisión y la anulación de las sanciones económicas que le fueron impuestas por las potencias occidentales.
Según palabras del ministro de Exteriores iraní, Mohamed Yawad Zarif, en caso de que su país colaborara para combatir las fuerzas terroristas en Irak, “los países con poder de veto en la ONU y Alemania (el grupo 5+1) deberían pedir al Consejo de Seguridad de la ONU que levante las sanciones” contra Irán. Irán comparte una larga frontera con Irak, también en la región norte iraquí, donde tienen lugar los mayores combates contra el yihadismo.
El papa Francisco hizo llegar una carta a la presidencia de Irak en la que pide una vez más “a todos los hombres y mujeres a los que les incumben responsabilidades utilizar todas las vías para poner fin a la crisis humanitaria”. “Me dirijo a usted (el presidente iraquí, Fuad Masum) con el corazón lleno de preocupación mientras sigo los brutales sufrimientos de los cristianos y de otras minorías religiosas, forzadas a abandonar sus hogares, mientras sus lugares de rezo son destruidos”, lamenta el papa.
Los ataques estadounidenses continuaron dos días después de que se difundiera un video mostrando la decapitación del periodista estadounidense. Según el “The New York Times”, el ISIS había exigido un rescate de U$S 132 millones por la liberación de Foley, pero el gobierno de EEUU se negó a pagar. Washington se niega a hacerlo desde hace muchos años alegando que ello supone un incentivo para nuevos secuestros. Sin embargo, eso también hace “que los rehenes estadounidenses tengan escasas posibilidades de ser liberados”, sostiene el diario. El Pentágono reveló además haber efectuado sin éxito un operativo militar en Siria para liberar rehenes estadounidenses en manos del ISIS, entre ellos, Foley que había sido secuestrado en Siria en 2012. “Desafortunadamente, la misión no fue exitosa porque los rehenes no se encontraban en el lugar en que se buscó”, señaló el portavoz del Departamento de Defensa, John Kirby.
Según medios de Estados Unidos, el Pentágono está considerando un pedido del Departamento de Estado para enviar más tropas a Irak. Tras la decapitación de Foley, los extremistas amenazaron con asesinar a más ciudadanos estadounidenses si Washington continuaba lanzando ataques en el norte de Irak.
El fiscal general Eric Holder abrió una investigación criminal sobre la muerte de Foley en el video, que mostró a un hombre enmascarado que hablaba inglés con aparente acento británico. El horror del video se extendió desde Occidente hasta Bagdad, donde los iraquíes se preguntan por qué EEUU y sus aliados no persiguieron a los yihadistas antes de que capturaran áreas de Siria e Irak y sometiera a los pueblos de esas zonas. (DPA-Reuters)