BUENOS AIRES.- “El Papa se tiró con Gentiletti para salvar el gol”, fue la explicación más aproximada que encontró Juan Mercier, sobre cómo hizo San Lorenzo para salvarse en una de las jugadas más claras que tuvo Nacional de Paraguay en el duelo que le permitió levantar por primera vez la Copa Libertadores.

Los integrantes del plantel, el cuerpo técnico, los dirigentes y los hinchas no tienen dudas -ni ocultan- que Francisco, desde que fue ungido Papa, no hizo otra cosa que darle una mano al “cuervo”, equipo del que es fanático.

Las estadísticas les dan la razón a todos los que siguen esta línea de pensamiento. San Lorenzo ganó el torneo Inicial 2013 y por primera vez en la historia se transformó en el rey de América. Todo eso desde que Jorge Bergoglio fue elegido como Sumo Pontífice.

El Papa, por esa cosas del destino, se perdió el partido por encontrarse de viaje en Corea del Sur, pero les ordenó a sus colaboradores que siguieran el cotejo. Y antes de comenzar con las actividades oficiales, se emocionó con las buenas nuevas.

“El Papa se enteró de la victoria cuando aterrizó en Seúl y estaba feliz. Los encargados le avisaron sobre el resultado de la final de la Copa, fue un lindo aterrizaje en Corea para él”, declaró Guillermo Karcher, oficial de protocolo del Vaticano.

“Francisco espera a los campeones en Roma”, subrayó el portavoz. “Los recibiremos con una gran fiesta”, señaló.

Los directivos de San Lorenzo, que no se cansan de agradecer las intercesiones celestiales del Papa, decidieron viajar al Vaticano apenas terminó el encuentro.

“La idea nuestra era ir hoy (por ayer) para allá, porque se lo habíamos prometido, pero lamentablemente Francisco está de gira. Lo que estamos tratando de hacer, y creo que se va a lograr, es viajar el próximo miércoles con una delegación pequeña, porque los jugadores no van a poder ir y entregarle la Copa el jueves en el Vaticano”, contó Marcelo Tinelli, vicepresidente del club.

Los directivos del “ciclón” tiene una meta mucho más ambiciosa aún: quieren convencer al Papa para que visite el país y, por supuesto, encabece un acto en el Nuevo Gasómetro. (Especial)