EL RÉQUIEM DE VERDI
El viernes 8/7, en la Sección Tucumanos, se publicó una reseña de las veces que se cantó el Réquiem de Verdi en el Teatro San Martín con una importante omisión que, modestamente, aclararé. Dicha obra se cantó por primera vez en Tucumán el jueves 22 de septiembre de 1966 y se repitió al día siguiente. Los conciertos fueron parte del Septiembre Musical de ese año. La Orquesta de la UNT fue dirigida por Juan Carlos Zorzi, el Coro Universitario de Tucumán fue preparado por Mario Cognato (h) y los cuatro solistas fueron Haydée de Rosa (soprano), Luisa Bartoletti (mezzo), José Nait (tenor) y Jorge Zanin (bajo). El coro ensayaba en la desaparecida Sociedad Argentina, Rivadavia al 400, en maratónicas y sacrificadas sesiones con la inestimable colaboración al piano de Celina Lis. La noche del estreno el teatro estaba colmado. Se abrió el telón, hubo silencio, y una voz clarísima de dijo desde la galería: “Este Réquiem es en homenaje a Santiago Pampillón, estudiante asesinado por la policía”. El aplauso fue ensordecedor. Ya se había producido la primera muerte estudiantil de Onganía: el nombrado, unos días antes, el 12/9/66, en Córdoba, En medio de esta tensa emoción, se cantó el Réquiem de Verdi, inolvidable ocasión para los que participamos allí.

Antonio Juan Liberti
Ecuador 375
San Miguel de Tucumán

SUEÑO ARBÓREO
Somos vecinos hace más de 40 años. Generosamente, vuelca su frondosa copa sobre mi patio encalado. Es un gigante envuelto en sombras, cuando abro muy temprano mi ventana. Con las primeras luces del día en la compleja trabazón de sus ramas, se viste con variados matices de verde. Lo habitan los pájaros que ensayan su coro de alabanza al día. Huele a nostalgias de otoño, a flores en primavera; en los primeros meses del año, a sabor amarillo, a pulpa jugosa de dorado mango. En serenos días de diáfano cielo luce solemne, imperturbable. Digno de ser admirado. Cuántas veces lo miro, lo gozo, ¡lo admiro! En instantes de contemplación, le pregunto... quiero saber qué está pensando, cerebro vegetal, generador de oxígeno y sombra que apacigua el ardoroso verano. Sueña con un planeta cuidado por el hombre, con llanuras y cerros verdes, surcado por hilos de agua.

Ana María D’Andrea de Dingevan dandreaanamaria@yahoo.com.ar

LA JUSTICIA
El cuerpo de auditores que auditó la fiscalía de Albaca y encontró numerosas irregularidades debería también hacer un esfuerzo con las otras fiscalías y controlarlas como es debido. No podemos confiar, como ciudadanos, en fiscales amigos de los poderosos. En esta bendita provincia, los corruptos y ladrones están de parabienes, mientras que la sociedad que vive decentemente, debe deambular por los pasillos de los tribunales soportando la desidia y el humor de los empleados, según con qué pie se levantaron ese día. Trámites que deberían ser fáciles se tornan engorrosos e imposibles. Causas probadas son enviadas a archivar. esto no sólo sucede en la fiscalía de Albaca. Miles de tucumanos se quejan de la inacción de los fiscales que tienen que defendernos; más fácil es archivar causas en las que los delitos están demostrados científicamente que trabajar para un juicio. Así estamos y así seguiremos mientras la tan mentada Justicia siga siendo afín la clase política y esta siga amparando a la injusticia. Señores: ¿no se dan cuenta de que los ciudadanos decentes y honestos ya no les creemos nada? ¿Que estamos hartos de sus aires de grandeza? ¿De sus jubilaciones de privilegio? ¿De que se nos rían en la cara, jubilándose tan pronto para no enfrentar sus impericias? ¿Que las jubilaciones que la mayoría de las personas deben esperar meses para cobrar, sean resueltas en un abrir y cerrar de ojos? ¡Así es fácil! No trabajo, archivo causas, etcétera, total, ya tengo la edad suficiente y con la ayuda de la Anses y de mis amigos quedo impune. ¡Díganme que esta Justicia no es un chiste! Un chiste negro, por supuesto.

Graciela Ronveaux
gracielaronveaux1@hotmail.com

ECONOMÍA SIN PLAN
La economía en la Argentina carece de un plan, especialmente desde 2008 hasta la fecha, por lo tanto se mueve con medidas salvadoras intentando con un zarpazo solucionar todos los males. Desde 2003 hasta 2007, se consumió el superávit fiscal que llegó al 4% del producto, viendo que hacía falta gastar más y mermando los recursos se intentó en marzo de 2008 lo que se llamó la 125, con un precio de la soja que superaba los 600 dólares y se hablaba que hasta los 800 no paraba, ya sabemos como terminó. Fracasado ese intento, volvieron al ámbito público las jubilaciones y el Gobierno se hizo de un stock inmenso en bonos y acciones y un flujo más que importante de aportes y contribuciones, lo que le permitió aumentar la emisión monetaria a toda máquina. En 2010, esto ya no alcanzaba, entonces se aceleró el endeudamiento interno con la Anses, bancos privados, Banco Nación y fundamentalmente el Banco Central, solicitándole pesos y dólares; la disminución de estos últimos nos llevó al cepo cambiario y con ello a la recesión en muchos rubros y a la parálisis en otros; entonces nace otra idea salvadora: arreglar los problemas externos para endeudarnos afuera. Es así que se soluciona Repsol, Ciadi, Club de París, y cuando empezaba el “mangazo” aparecen los “fondos buitre”, que tienen a todo el gobierno inflando el tema y sin intentar aliviar la recesión en la que vivimos. Digo, ¿por qué no intentar un mercado cambiario múltiple, dos por lo menos? No es solución y menos si no bajamos la inflación, pero reactivaría la economía, hasta que vengan los supuestos préstamos externos o hasta que llegue 2015.

Luis Mónaco
monacoluis@hotmail.com

EL EPAM
En abril de 2013 los alumnos del programa EPAM nos encontrábamos desalojados, literalmente arrojados al galpón de la ex usina de avenida Sarmiento al 1.100. Habiendo perdido nuestro patrimonio moral, simbólico y material, solicitamos un espacio de reunión a la comisión directiva de la Biblioteca Alberdi. Desde ese entonces fuimos acogidos en esa ilustre casa, donde encontramos respetuosamente un techo y un ámbito apropiado para discutir y reconstruir nuestro futuro ¡De hecho habíamos perdido casi 30 años de nuestra historia! Durante este año y medio hemos crecido sustancialmente en nuestras ideas. Elaboramos proyectos, definimos objetivos para ayudar a la sociedad a comprender el nuevo rol que nos compete como adultos mayores. Ya que la longevidad en la sociedad global es un hecho contundente e irreversible, donde es imperiosa la necesidad de aggiornamento permanente para lograr la reinserción de las personas de la tercera edad en el quehacer cotidiano. Meta que persigue el programa EPAM desde su creación. Tratábamos de rescatar el espacio perdido, el tangible y el intangible (la dignidad)… El lugar que debíamos ocupar en la sociedad en general y en la tucumana en particular. La asamblea de alumnos autoconvocados ha transitado por períodos de fracasos y éxitos en forma alternada, pero hoy finalmente podemos decir que como resultado del quehacer de todos sus miembros vemos que: a) se ha concretado la solución legal de varios puntos importantes para el desarrollo de nuestros talleres en un ámbito normal, como ser un “convenio transaccional” sobre la deuda contraída años pasados con los propietarios del inmueble, que dio lugar felizmente ,a la celebración de un nuevo contrato de locación con ellos. b) Que observamos que se está realizando una importante reparación en la vieja casona de calle Virgen de La Merced 417 y c) estamos muy esperanzados en la nueva gestión universitaria. Para finalizar expresamos que apoyándonos en el ideario de nuestro primer estadista argentino, J. B. Alberdi, que da nombre a esta biblioteca, decimos: “Todos estos son hechos normales reconquistados. Hemos sentando un precedente. Que constituirá la roca granítica, donde sin duda descansará nuestra historia y desde donde se proyectará nuestro futuro en forma duradera”.

Sara Taullard de Peralta
taullardsara@live.com.ar

“EL ESTADO NO SOY YO”
“El Estado no soy yo”, podría haber sido el título de una noticia reciente que pasó casi inadvertida. El flamante Presidente de Costa Rica, Guillermo Solís, ha firmado un decreto prohibiendo que su nombre esté en placas de puentes, carreteras o edificios que se inauguren. “Eliminaremos las placas con nombre en toda obra pública en mi gobierno, porque las obras son del país y no de un gobierno o un funcionario en particular”, expresó. La decisión también impide que su retrato esté colgado en las dependencias públicas costarricenses. Es tal el contraste que se presenta entre esta decisión y el culto a la personalidad ejercido por estos lares, que me pareció que de alguna forma había que aplaudir esta noticia que desde todo punto de vista enaltece a Costa Rica.

Humberto Solá Cánepa
hsola2@hotmail.com

LOS ENAMORADOS
El revuelo causado por viaje del legislador Cobos a las Malvinas y la proclamación de su candidatura, ha suscitado una reacción, la más de las veces equivocada. En otra época (1884-1886), sucedió en nuestras Islas algo poco conocido. Se creó la gobernación de Santa Cruz, y se designó gobernador al marino Carlos María Moyano, que había nacido el 4 de noviembre de 1854, en Mendoza. Tuvo una meritoria carrera militar. En 1885, viajó a las Malvinas, donde compró ovejas de raza y carbón para venderlos en Santa Cruz. En uno de esos viajes conoció a Ethel Turner, de sólo 16 años, de quien se enamoró. Pero ella no era una rubita cualquiera, sino la sobrina del gobernador inglés de las Islas, ocupadas en 1833. Durante el tiempo del noviazgo, es de suponer que Moyano viajaba periódicamente a ver su amada y que conversó muchas veces con gobernador británico. No es mucho suponer que la boda, que se realizó en Santa Cruz el 15 de septiembre de 1886, contó con la presencia del tío de la novia. ¿Y qué pasó? Nada, por supuesto, porque los argentinos en esa época éramos más sensatos que ahora. Y mirábamos la realidad por la puerta abierta, en lugar de espiarla por el ojos de la cerradura. ¿Se imaginan los lectores las barbaridades que habrían recibido estos enamorados, si les hubiera tocado vivir en estos años? Sorpresas como estas hay varias en la tan poco divulgada historia de las Malvinas. Debo dejar en claro que si tuviera mi pasaporte sellado por los ocupantes, lejos de avergonzarme de ello lo consideraría un diploma de honor. Mostraría que en lugar de Miami o Cancún, he privilegiado el conocimiento de mi patria.

Tulio Santiago Ottonello

tso.lu2ku@gmail.com

LOS MINUSVÁLIDOS
Cuando éramos chicos y corríamos carreras. Al más chico lo poníamos varios pasos adelante. Le dábamos cancha. Tantos más pasos cuando más chico era el corredor. Así es la vida de los minusválidos, necesitan, tienen derecho a varios o muchos pasos adelante de los otros para correr en igualdad de condiciones. No les concedemos nada, no les reconocemos un derecho elemental de los más elementales de los derechos humanos. Para poder ganarse la vida, el ciego, el amputado, el débil mental por cualquier causa, el sordo, el mudo, requieren muchos pasos de ventaja. ¿Pueden un sordo, un mudo, un ciego manejar una computadora? Pues enseñémosles y que lo hagan como el mejor, con orgullo, pero enseñémosles. No quieren limosna, no quieren favores; quieren ejercer el derecho elemental a trabajar. Quieren ser capaces de sostenerse a sí mismos y sostener una familia. Y digo computadora como podría decir mil cosas distintas. Desde traducir Braille a estudiar una carrera independiente. Desde música a artesanías, pasando por distintos profesorados. Sólo cuando tenemos el problema en casa reaccionamos. ¿Cuánto cuesta una operación de ojos o de oído o de cerebro? ¿Cuánto cuestan una pierna ortopédica o una silla de rueda especial? Conocemos a genios que se levantaron sobre sus disminuciones físicas o mentales porque tuvieron los medios para hacerlo. ¿A cuántos de ellos perdemos, desperdiciamos? De cuántos cerebros nos privamos? No es caridad, es obligación la de velar por ellos, como por los niños y las madres necesitadas y los ancianos. No creo que Dios justifique a un pueblo que olvida a los débiles.

Jorge Lobo Aragón

jorgeloboaragon@gmail.com

EL USO POLÍTICO DE PERÓN
Es sorprendentemente curioso el uso político que varias parcialidades hacen de la figura de Perón. Al pobre difunto lo comprometen con cuanta ideología de cualquier laya y origen exista. Si el viento llega del oriente, es comunista o socialista; si viene de Europa del centro, es fascista; si es del norte americano, es capitalista; si viene del sur es populista; si viene del norte de Europa, es neocapitalista salvaje. Lo peor de estas alternativas es que todas las realizan en nombre de Perón y su doctrina. Actualmente aparecieron unos afiches que aseguran que “la doctrina peronista es esencialmente humana y cristiana” (¿será que tienen la influencia de los vientos franciscanos?). Es tan variada la oferta peronista como la cantidad de candidatos que pretenden usufructuarla. Pero la historia nos da un hilo conductor que engarza a todas estas ideologías: la corrupción impune y la tergiversación de principios. Este hilo corrupto y tergiversado es el que conserva lealtades. Leyendo la nota periodística de la pág. 2 de la edición del 4 de julio, LA GACETA nos informa que “sin escuchar los argumentos, el FpV impuso su número para rechazar todos los proyectos presentados en la Comisión de Juicio Político de la Cámara de Diputados de la Nación, contra el vicepresidente Amado Boudou”. También nos informa que el presidente de dicha Cámara, Julián Domínguez, manifiesta: “Lo mejor que nos puede pasar es que las instituciones sean las que se pronuncien. Hay un apresuramiento que no se compadece con el tiempo de las instituciones”. Si ese hilo de la “lealtad” se corta, ¿no podríamos pensar que varias figuras más importantes que un vicepresidente en franca decadencia tendrían que afrontar (y enfrentar) la Justicia? Se ve que el terror de encontrarse cara a cara con la dama de ojos vendados que blande la espada es altamente pavoroso, amén de peligroso (más de uno deberá devolver muchos dólares). Dejen que “los muertos descansen en paz” y que todos los que habitamos este bello país leamos las opiniones del papa Francisco sobre corrupción.

Luis Vides Almonacid
luisvides47@yahoo.com.ar

JUBILADOS TRANSFERIDOS
Me causó sorpresa lo manifestado por el gobernador (LA GACETA, 4/6), que ante el reclamo de los empleadoas públicos, dice: “no sé por qué es el reclamo, yo voy a cumplir con todo lo prometido; si cometimos algún error, lo corregiremos; si hay que cambiar la ley, también la cambiaremos”. Señor Gobernmador, queremos recordarle que los jubilados provinciales tenemos una ley, la 7.652, promulgada por usted y que no tiene nada para cambiarle; simplemente tiene que cumplirla. Esa ley dice que el Gobierno de Tucumán tiene que pagarles a los jubilados transferidos movilidad y porcentualidad, pero usted está empecinado en no darle cumplimiento. Como seguramente se olvidó de nosotros, le recordamos que hace 18 años, mediante expte. N° 43-N-1996, resolución N° 2.823, nos obligaron, aduciendo que nosotros lo solicitamos, a retirarnos con una jubilación ordinaria reducida, o sea una “cesantía encubierta”. También la ley decía que nuestro sueldo se liquidaría a partir del 28 de julio de 1996, en la proporción del 70% móvil, de conformidad con las disposiciones de la ley provincial N° 6.446. Por lo tanto, Ud. no debe seguir diciendo que el responsable de pagarnos es la Anses; el Gobierno de Tucumán tiene la resposabilidad de pagarnos y si usted no tiene plata, está estipulado que puede solicitar préstamos, a Anses o a los “Fondos buitre”; el problema es suyo. Le recordamos que esos son los compromisos que se asume al aceptar ser gobernador, de velar por el bienestar del pueblo que lo votó. También le queremos recordar, y esto es lo más grave, que los jubilados provinciales transferidos son una raza que se va extinguiendo; no es renovable, el tiempo se acaba para los jubilados. De ser 30.000, ya quedamos, mal contados, 14.000. Señor Gobernador, ya vivimos de cuarta categoría durante muchos años, siendo indigentes, mal alimentados, olvidados. Los jubilados y pensionados le pedimos que por lo menos nos pague todo lo que nos debe para que así tengamos la satisfacción de ser “sepultados de primera”. .

Carlos Núñez

Paraguay 3.282 San Miguel de Tucumán