FORTALEZA.- Brasil no está para festejos. Ni siquiera después de haberse sacado de encima a la peligrosa Colombia de José Pekerman y conseguir el pase a semifinales de su propio Mundial. Primero, la furia de sus habitantes, indignados por los gastos siderales en la organización del torneo en un país con necesidades más urgentes. Luego, el desplome de una autopista que termina en tragedia. Y ayer la malaria llegó al césped del estadio Castelao: Neymar, la única estrella de un scratch acostumbrado a las constelaciones, le dijo adiós al Mundial luego de que un rodillazo del colombiano Camilo Zúñiga le produjera la fractura de la tercera vértebra lumbar. Brasil, golpeado, deberá hacerle frente a la poderosa Alemania sin su emblema.

Ricardo Lasmar, uno de los médicos de la selección anfitriona, explicó que, aunque no se trata de una lesión grave, es imposible que el “10” pueda estar recuperado antes de que termine el torneo, el domingo 13 de julio.

“El examen de la tomografía computada mostró una fractura en la tercera vértebra lumbar. No es una fractura grave, que precise cirugía, pero limita los movimientos, precisará de una cinta. El plazo es muy corto para que pueda volver”, dijo Lasmar.

La desafortunada acción se produjo al minuto 86, cuando Neymar recibió una pelota de espaldas al lateral colombiano, que llegó a la carrera y estrelló su rodilla sobre la zona lumbar del brasileño. El delantero de Barcelona quedó tendido en el piso, con visibles gestos de dolor, aunque muchos pensaron que se trataba de una exageración para enfriar el partido y bajar las revoluciones del elenco “cafetero”, que había arrinconado al local en busca del empate.

El astro paulista fue retirado en camilla y conducido al hospital de Fortaleza, donde se confirmó el diagnóstico que ningún brasileño quería escuchar. Varios hinchas brasileños se reunieron en las afueras del hospital para animarlo con gritos de “Fuerza Neymar”. Su compañero Fred dijo: “vamos a hacer todo lo posible para ganar la Copa por ti. Estamos cada vez más juntos”.

Hasta la propia presidente, Dilma Roussef, manifestó su apoyo: “como todo Brasil, aliento a Neymar para que se mejore”. (Reuters-Especial)

¿Pensás que Zúñiga fue deliberadamente a golpear a Neymar?