SANTIAGO DEL ESTERO.- La pesquisa por el fraude cometido con órdenes falsas a la Obra Social de los Empleados Públicos de Catamarca abrió una nueva línea de investigación, cuando dos de los profesionales citados por la Justicia no se presentaron a la indagatoria, y se empezó a sospechar que esas dos personas no son médicos. Incluso, según parece, usaron las identidades de dos santiagueños para ejercer ilegalmente la profesión.
En la actualidad, hay 14 imputados, de los cuales 11 son efectivamente médicos.
Miriam Isabel Argañaraz, con domicilio en La Banda, y Oscar Argentino Tapia, con dirección en Las Termas, son los nombres que dieron la mujer y el hombre que hoy tienen pedido de captura nacional, por la Justicia de Catamarca. Pero, desde el momento en el que se descubrió que Tapia y Argañaraz no eran médicos (porque nunca se recibieron), se especuló con la posibilidad de que sus nombres y demás datos no pertenecieran a personas “reales”.
“Mire si voy a ser médica. Como pude terminé séptimo grado”, le dijo -a "Diario Panorama"- Mirian Argañaraz, la bandeña cuyo nombre habría sido usado en Catamarca. “Buen día, ¿la doctora Argañaraz?”, preguntó el funcionario policial. La bandeña miró desconcertada, ya que ignoraba de qué se trataba y hasta pensó que era una broma.
“Meses atrás me operaron en el hospital. No tengo ni obra social, ni mutual”, agregó. "No sé qué habrá pasado en Catamarca, pero jamás he sido doctora”, insistió.
Las identidades de Argañaraz y de Tapia fueron confirmadas por la comisión de policías de Catamarca que arribó a Santiago para cumplir con la orden de detención de ambos, solicitada por los fiscales de la Unidad Fiscal de Delitos Especiales y contra la Administración Pública, Miguel Mauvecín y Marcelo Sago.
La orden de detención que firmaron los fiscales de la Unidad Fiscal de Delitos Especiales y Contra la Administración Pública, intentaría confirmar la presunción de que estos nombres y las direcciones no existen realmente.